"Es antiético": Cuestionan a Roosevelt Hernández por manipulación de informes

Como una conducta antiética fue percibido el actuar del jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas (FF AA), Roosevelt Hernández, luego de la grave denuncia de Cossette López, consejera presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), sobre una reunión secreta "con un expresidente y una candidata" para manipular informes militares que responsabilizaban a elementos de la institución castrense por el caos en las elecciones primarias.

LA PRENSA Premium entrevistó a altos exmandos militares, miembros de la sociedad civil y expertos en temas políticos, quienes condenaron la acción de Hernández, argumentando que su afán por preservar el prestigio de la institución pone en peligro su integridad y la confianza pública -si se comprueban los hechos-.

El general en condición de retiro, Luis Maldonado Galeas, se mostró sorprendido por la conducta de Hernández en la denuncia interpuesta por la consejera, pues explicó que no son patrones de una institución como las Fuerzas Armadas.

"Esto cae en la conducta antiprofesional, antiética y antiinstitucional. Es improcedente que un jefe del Estado Mayor Conjunto se reúna con una persona que ocupa un cargo de asesoría de la presidenta de la República, que no tiene nada que ver con la toma de decisiones del Estado y el mal ejemplo que se da en la Secretaría de Defensa", explicó.

La consejera presidenta denunció el miércoles pasado que el fin de la reunión con el asesor presidencial Manuel Zelaya Rosales y la candidata presidencial de Libre y secretaria de Defensa, Rixi Moncada, fue manipular informes sobre el caos del retraso en elecciones primarias, que salpicó a la institución castrense y responsabilizar solamente al CNE.

"Fingiendo una subordinación que nunca ha existido y siguiendo con una coordinación que nunca ha dejado de existir, hoy el alto mando de las Fuerzas Armadas se reunió con un ex presidente y una candidata y decidieron sustituir los informes que ya existían, donde se señalaban responsables militares, por nuevas versiones donde se señala solo al CNE por lo del 9 de marzo. Dejo constancia y que lo sepa todo el pueblo hondureño", informó a través de su cuenta oficial de X.

La denuncia de López coincide en gran parte con una investigación publicada por El Heraldo referente a la reunión del jefe del Estado Mayor Conjunto con actores políticos para manipular dos informes, encubriendo así la responsabilidad de los militares.

Maldonado mencionó que la falta de responsabilidades internas en las Fuerzas Armadas "es una ocultación de realidades institucionales para salvar su propio prestigio y de repente alguna línea superior".

Según expuso el entrevistado, si Hernández se reunió con Manuel Zelaya Rosales, el esposo de la presidenta Xiomara Castro, de quien trataría la denuncia de López, tiene que haber recibido una orden, porque "un jefe del Estado Mayor Conjunto nunca se ha reunido con un asesor de gobierno ni mucho menos coordinador de un partido político para tomar decisiones".

"Le voy a contar y a recordar algo que a nosotros los oficiales retirados nos dejó asombrados. Hubo hace unos meses una reunión de las Fuerzas Armadas en donde el señor asesor estaba -como un presidente- en el centro de la mesa principal y al lado derecho de él, la secretaria de Defensa, y al lado izquierdo el jefe del Estado Mayor. Todas esas degradaciones constitucionales son producto de estas formas de gobierno o dinastías familiares que nos tienen en esta situación tan penosa", agregó.

Tras la denuncia, Rixi Moncada rechazó los señalamientos, afirmando que "es absolutamente falso que me haya reunido con el alto mando de las FF. AA. para cometer semejante vileza".

Moncada se defendió diciendo que la conspiración proviene del Partido Nacional y dijo que "la diferencia es que hay un proceso de cambio en las FF AA, no han salido matones y le han perdido perdón al pueblo hondureño desde 2022, por la instrumentalización que el golpismo hizo de la institución”.

Este medio conoció que el informe oficial de las Fuerzas Armadas sobre lo ocurrido en las elecciones primarias responsabilizó a tres altos oficiales y dos tenientes por las irregularidades en el proceso de distribución del material electoral.

La Inspectoría General de las Fuerzas Armadas abrió una investigación, al igual que la Inspectoría del Ejército.

El informe de la Inspectoría General señaló como responsable al general Nahún Canales Cruz, actual comandante del Comando de Apoyo Logístico (Calfa), y recomendó su relevo como supervisor del trabajo de distribución de los materiales electorales.

Por su parte, la investigación de la Inspectoría del Ejército responsabilizó a dos coroneles: Nicolás Edulfo Serrano Benítez, comandante del COES y encargado de la distribución en Francisco Morazán; y Alan Barahona Rosales, comandante del Primer Batallón y responsable de la distribución del material electoral en el Distrito Central.

Sin embargo, se conoció que Hernández habría ordenado incluir en el informe factores como la impresión tardía de papeletas, la ausencia de custodios y el cambio abrupto de camiones a autobuses de ruta sin previo aviso.

La manipulación de informes es considerada dentro de la institución como un acto desleal y antiético, que puede realizarse antes de ser remitidos a las instancias correspondientes, como la presidenta Xiomara Castro, el CNE, las Fuerzas Armadas, o cualquier otra autoridad pertinente.

Si lo que denuncia López es cierto, dicha manipulación debió haberse realizado uno o dos días después de las elecciones, período durante el cual este medio tuvo conocimiento de una presunta reunión.

"Cuando uno asume como jefe de FF AA está asumiendo la responsabilidad histórica de preservar lo bueno que ha tenido la institución. Y una de las cosas buenas que ha tenido la institución es su imagen y comportamiento frente al pueblo hondureño", expresó Isaías Barahona, exjerarca militar.

Barahona destacó que quien asume este cargo debe velar por la buena imagen de la institución, pero advirtió que esta no se protege ocultando errores. "La imagen se cuida no cometiendo las fallas y si una vez que se ha cometido error —ya sea por negligencia o incompetencia— la única forma de cuidar la institución, es decir, este fue el error y el responsable y ponerlo frente a los tribunales. Escondiendo fallas más bien el prestigio de la institución se echa a perder", afirmó.

Tras el caos vivido el 9 de marzo durante las elecciones primarias de 2025, cuando cientos de hondureños en Tegucigalpa y San Pedro Sula se vieron obligados a votar en horas de la noche, el CNE decidió despedir al coordinador del proyecto de transporte, Joel Ramos, por no responder a sus llamados en plena crisis.

Mientras tanto, las Fuerzas Armadas han evadido responsabilidades pese a evidencia clara de maletas electorales abandonadas en la vía pública y sin custodia, incumpliendo su deber de proteger el material electoral. Hasta ahora, no han tomado medidas correctivas y han culpabilizado al CNE del retraso.

Para el analista Miguel Calix, Roosevelt Hernández debe tomar decisiones como militar y decidir cómo quiere que lo recuerde la historia, pues los ojos del pueblo hondureño están puestos sobre las Fuerzas Armadas.

"¿Quiere que el legado sea de defensor y protector de la República y democracia o como destructor de documentos y falseador de la verdad?", cuestionó -en caso de ser ciertas las declaraciones de López-.

El experto destacó que las FF AA deben recordar que su compromiso es con la Constitución y las leyes, y no con las autoridades. También se refirió al lema de la institución castrense.

"Vamos a ver: lealtad, honor y sacrificio, pero mentir es faltar al honor, no hacer público el informe es olvidar la lealtad y la lealtad no es con personas, ni generales, ni ministras ni expresidentes, ni siquiera con el CNE, la lealtad es con la República y el sacrificio se hace por el pueblo, no por personas ni partidos políticos".

Por su parte, Lester Ramírez consideró que la denuncia solo contribuye a magnificar el problema. Señaló que corresponde al CNE realizar una investigación y presentar un informe que complemente las indagaciones que realiza el Ministerio Público.

En cuanto a Roosevelt Hernández, Ramírez advirtió que su actuar está dañando la imagen de las Fuerzas Armadas. "Hay personas dentro de la institución que no están nada cómodas con el rol que está asumiendo Roosevelt, y su cercanía con Libre podría provocar una crisis interna en las FF AA. Además, es muy probable que, si en las próximas elecciones llega otro partido al poder, este busque, a través del Congreso Nacional, limitar aún más el papel de los militares en este tipo de situaciones", expresó.

La consejera Ana Paola Hall, quien el día de las elecciones mencionó que "en una hora el CNE hizo más que las FF AA en ocho", defendió el jueves al órgano electoral ante la posible manipulación de informes.

"No vamos a tolerar que imputen al CNE responsabilidades indebidas, que no merecemos y que son atribuibles a otros. Ni cortinas de humo o sabotaje, con la intención de desacreditar el trabajo del equipo del CNE el 9 de marzo. No permitiremos que atenten contra nuestra lucha democrática de brindarle al pueblo hondureño elecciones y que sean limpias y transparentes", apuntó.

En tanto, el consejero vocal del CNE, Marlon Ochoa, se ha limitado a hablar sobre las denuncias de López. Lo último a lo que se refirió fue a la totalidad de 28,861 actas pertenecientes a los tres partidos principales que se encuentran retenidas debido a inconsistencias en sus resultados.

Ochoa señaló que para garantizar la transparencia del proceso electoral es imprescindible que se realice un escrutinio especial en el 100% de estas actas.

Este escrutinio estaba programado a partir del jueves, pero casi al medio día no había iniciado en las bodegas del Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop). Se espera que los resultados estén listos para el 8 se abril, según lo enmarca la Ley.

Luego de la denuncia de López, el candidato nacionalista, Nasry Asfura, expuso que la voluntad del pueblo está en riesgo y López tiene desventaja ante los dos consejeros (Hall y Ochoa). "Esta incertidumbre no se puede permitir para las próximas elecciones", mencionó Asfura.

Los entrevistados expresaron su preocupación por la falta de consensos y la constante confrontación entre los tres consejeros encargados de cumplir con una misión constitucional.

La situación, dijeron, refleja una clara división interna, donde parece que cada uno tira hacia direcciones opuestas, poniendo en riesgo el cumplimiento efectivo de su función.

El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) emitió el jueves un comunicado instando a las autoridades aprender de los errores para evitar repetir errores en las elecciones generales y exigió una investigación exhaustiva al Ministerio Público (MP) para deducir responsabilidades.

La última aparición pública de Roosevelt Hernández para abordar los atrasos en el material electoral se dio el pasado martes en el programa Frente a Frente, donde afirmó con rotundidad que la misión estaba cumplida, admitiendo que "el único principio que no se respetó fue la puntualidad".

Sin embargo, el jueves, las Fuerzas Armadas emitieron un comunicado en el que rechazaron las acusaciones de López y detallaron que, desde el 10 de marzo, al menos 11 oficiales han rendido declaración ante el Ministerio Público, presentando informes, comunicaciones, bitácoras y registros telefónicos. "El alto mando jamás intentará alterar un informe o bitácora que refleje el trabajo que realizamos", afirmaron.

Hasta el momento, el MP no ha presentado ningún requerimiento, pero han informado que la investigación sigue en curso.