El secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, anunció este domingo la deportación de dos peligrosos líderes de la MS-13 y 21 de sus miembros más buscados a El Salvador, donde enfrentarán la justicia.
A través de su cuenta oficial en redes sociales, Rubio informó que, además, se ha enviado a más de 250 extranjeros vinculados al grupo criminal Tren de Aragua a territorio salvadoreño.
Estas acciones forman parte de un acuerdo de cooperación con el Gobierno de Nayib Bukele, quien se comprometió a mantener a estos reclusos en el sistema penitenciario salvadoreño, según dijo Rubio.

“El Salvador se comprometió a mantener en sus excelentes cárceles a un precio justo que también ahorrará dinero a nuestros contribuyentes”, destacó el funcionario estadounidense,
Asimismo, subrayó el impacto positivo que esta medida tendrá en la seguridad regional y en la economía de Estados Unidos.
Rubio también elogió la gestión de Bukele en materia de seguridad, calificándolo como “el líder de seguridad más fuerte de nuestra región” y un “gran amigo de EE. UU.”.
Reacción del Gobierno de Bukele
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, se pronunció sobre esta deportación de miembros de la MS-13 y el Tren de Aragua. El mandatario indicó que los deportados fueron trasladados al Centro de Reclusión para Terroristas (CECOT), por un período de un año (renovable).
“Estados Unidos pagará una tarifa muy baja por ellos, pero una tarifa alta por nosotros. Con el tiempo, estas acciones, combinadas con la producción que ya generan más de 40,000 reclusos que participan en diversos talleres y labores bajo el programa Ocio Cero, contribuirán a la autosostenibilidad de nuestro sistema penitenciario. Actualmente, cuesta $200 millones al año”, explicó Bukele.