El Departamento de Estado de Estados Unidos publicó una nueva "Lista Engel” en que se señala por corrupción y socavamiento de instituciones democráticas a varios exfuncionarios y políticos hondureños.
Estados Unidos también menciona a personas de Nicaragua, El Salvador y Guatemala en la "lista negra" que ha publicado durante los últimos años, a quienes, en primera instancia, revoca sus visas e investiga por actos relacionados con corrupción.
Al menos 46 hondureños (incluyendo a los diez de esta entrega) han sido ingresados a la “Lista Engel” del Departamento de Estado de Estados Unidos y que se publica cada año, señalando en ella a personas consideradas corruptas y anti democráticas de los países del Triángulo Norte.
Lista de hondureños (descripción es un texto íntegro extraído de la lista oficial)
Alex Alberto Moraes Girón: ex gerente administrativo de la empresa estatal Inversión Estratégica de Honduras, incurrió en corrupción significativa al malversar fondos públicos durante la pandemia de Covid-19, incluyendo la defraudación al gobierno hondureño de aproximadamente 1,6 millones de dólares destinados a mascarillas para uso del personal médico.
Alexander López Orellana: actual alcalde de El Progreso y secretario general del Consejo Ejecutivo Central del Partido Liberal, incurrió en corrupción significativa al adjudicar indebidamente contratos municipales multimillonarios a sus aliados políticos.
Edna Yolany Batres Cruz: ex ministra de Salud, incurrió en corrupción significativa cuando defraudó al gobierno hondureño por más de 300.000 dólares al confabularse con funcionarios del Ministerio de Salud y empresarios del sector privado para adjudicar indebidamente contratos gubernamentales.
Jesús Arturo Mejía Arita: ex gerente general de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica de Honduras (ENEE), incurrió en corrupción significativa al adjudicar contratos no competitivos o sobrevaluados para la generación de electricidad y otros servicios relacionados con la energía a cambio de sobornos, y al facilitar esquemas corruptos relacionados con la contratación y el despido de empleados de la ENEE a cambio de sobornos.
Marcelo Antonio Chimirri Castro: ex director de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones, incurrió en corrupción significativa al cometer fraude para mantener indebidamente en vigor un acuerdo de telecomunicaciones a cambio de sobornos y obstruyó las investigaciones sobre sus actos corruptos intimidando a periodistas.
Miguel Rodrigo Pastor Mejía: ex director de la ahora desaparecida Secretaría de Obras Públicas, Transporte y Vivienda, incurrió en corrupción significativa, blanqueando dinero en nombre de la organización de narcotraficantes Los Cachiros, al adjudicar 2,76 millones de dólares en contratos del gobierno hondureño a una empresa de construcción controlada por Los Cachiros.
Roberto Antonio Ordóñez Wolfovich: ex ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, ex ministro de Energía y ex asesor presidencial del Presidente Juan Orlando Hernández, incurrió en corrupción significativa al malversar fondos estatales mediante la sobrevaloración de proyectos de obras públicas.
Samuel García Salgado: actual miembro del Congreso Nacional de Honduras por el Partido Liberal, socavó procesos o instituciones democráticas al manipular el resultado de las elecciones a la Corte Suprema de Justicia en 2023 para su beneficio personal y político.
Víctor Elías Bendeck Ramírez: empresario privado y ex miembro del Parlamento Centroamericano, involucrado en corrupción significativa a través del Parlamento Centroamericano, se involucró en corrupción significativa a través de una serie de actividades empresariales fraudulentas en los sectores bancario, inmobiliario y otros, y mediante el uso de su influencia en la corrupción.
Yani Benjamín Rosenthal Hidalgo: actual presidente del Partido Liberal en Honduras, socavó procesos o instituciones democráticas manipulando el resultado de las elecciones a la Corte Suprema de 2023 para su beneficio personal y político. Rosenthal también utilizó su influencia con funcionarios para evadir la rendición de cuentas por aparentes violaciones de la ley hondureña por parte de funcionarios hondureños.
Honduras y su historia con la Lista Engel
La “Lista Engel” surgió en 2019 por iniciativa del excongresista demócrata de Nueva York, Eliot Engel.
Engel propuso una legislación para “apoyar al pueblo de Centroamérica y fortalecer la seguridad nacional de los Estados Unidos abordando las causas fundamentales de la migración desde El Salvador, Guatemala y Honduras”, reza el sumario de la ley.
Desde la aprobación de la legislación por el pleno del Congreso el 22 de diciembre de 2020, recae en el secretario de Estado y el engranaje del Departamento de Estado pormenorizar las investigaciones para cumplir con el mandato de incluir a aquellas figuras en los tres países vinculadas con actos de corrupción o ataques a la democracia.
Gustavo Alberto Pérez, Augusto Domingo Cruz Asensio, Eleazar Alexander Juárez Sarabia, Miguel Edgardo Martínez Pineda, Héctor Enrique Padilla Hernández, Dennys Antonio Sánchez Fernández, Elden Vásquez, Juan Orlando Hernández Alvarado y Enrique Alberto Flores Lanza son algunos de los incluidos en la lista.
Además, Roberto David Castillo Mejía, Gonzalo Molina Solorzano, Harvis Edulfo Herrera Carballo, Marco Antonio Bográn Corrales, José Celin Discua Elvir, José Porfirio “Pepe” Lobo, Sara Ismela Medina Galo, Milton Jesús Puerto Oseguera y Elvin Ernesto Santos Ordóñez.
Asimismo, están incluidos Wesly Milena Vásquez López, David Eduardo Ortiz Handal, Juan Ramón Maradiaga, Carlos Josué Romero Puerto, Juan Carlos “El Tigre” Bonilla Valladares, Elmer Jeovanny Ordóñez Espinal, Claudia Yamilia Noriega González, Rosa Elena Bonilla de Lobo, Rodolfo Irías Navas, Gladys Aurora López, Oscar Nájera, Audelia Rodríguez Rodrigo, Juan Carlos Valenzuela Molina, Román Villeda Aguilar, Carol Vanessa Alvarado Izaguirre, Edgardo Antonio Casaña Mejía, Carlos Josué Montes Rodríguez, Javier Rodolfo Pastor Vásquez y Rasel Antonio Tomé Flores.