La euforia llegó al cafetorium de la Escuela Internacional a las nueve de la noche cuando Franco De Vita hizo su aparición en escenario, luego de la brillante interpretación de los teloneros catrachos Sony y Fernando.
El público se puso de pie y ovacionó a uno de los grandes de la música latina al interpretar su primera melodía “Stop” de su nuevo álbum.
Franco, con su carisma que lo caracteriza, se dirigió a los espectadores y agradeció por la presencia de los fans y dijo sentirse muy contento de estar en el país y espera muy pronto regresar.
Repertorio
La noche se volvió intensa a medida interpretaba sus canciones más afamadas como “Tú de que vas”, “Será” y “Volar”. El público cantó el coro a más no poder.
Sin duda, el honor más grande se lo llevó el dúo catracho de Sony y Fernando, quien fue invitado por Franco a mitad de concierto para que cantaran con él, mientras el cantante los alababa por su talento.
Las féminas dieron rienda suelta a sus emociones al escuchar el tema “Si la ves”, quienes no pararon de gritar y cantar. Mientras otras lloraban y extendían sus manos para estrecharlas con las del cantante.
Franco se compenetró con el público y dio todo de sí para convertir la noche del viernes en una velada inolvidable.
Cambio de vestuario
El calor de los sampedranos hizo sudar al artista que hizo cambio de vestuario en tres ocasiones.
Las damas no podían contener su euforia al ver su cantante.
Las jovencitas más osadas subieron a la tarima y aprovecharon para besar y abrazar su ídolo musical. Mientras que otras damas y damitas le lanzaron calcetines.
Franco continuó con su presentación con un popurrí de todas sus canciones que han hecho historia en el mundo de la música.
“Me siento muy contento de poder colaborar con una noble causa y felicito a todas las personas que se dedican a realizar obras sociales a beneficio de los necesitados”, dijo el artista.
Las áreas de VIP y generales se llenaron a cabalidad y se estima que unas 1,500 personas se reunieron aquí para deleitarse con la exquisita voz del intérprete venezolano.
En muchas de sus canciones Franco se hizo acompañar de sus músicos.
“No basta” fue una de las melodías más coreadas por hombres y mujeres que disfrutaron de una noche llena de romanticismo. El cafetorium estaba equipado de tres pantallas gigantes para que las personas pudieran apreciar cada momento y gesto del artista.
El concierto terminó cerca de la medianoche dejando satisfechos a los fans del músico.
El concierto se realizó a beneficio de Guarderías Infantiles.
Franco deleitó a los sampedranos al ejecutar el piano.