19/12/2025
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La boda real que Europa anhelaba

  • Actualizado: 27 febrero 2009 /

Se conocieron en un 'fitness center'. Él se convirtió en su entrenador personal y entre carreras por el parque, bicicletas y pesas surgió un amor con el que no pudieron acabar los reyes.

Se conocieron en un 'fitness center'. Él se convirtió en su entrenador personal y entre carreras por el parque, bicicletas y pesas surgió un amor con el que no pudieron acabar los reyes.

La princesa, de 31 años, y el profesor de gimnasia, de 35, son pareja desde hace siete años. Fue así aunque los monarcas Carlos Gustavo y Silvia de Suecia intentaron a toda costa a que la relación no prosperara.

La princesa Victoria Ingrid Alice Desiree y su hoy prometido oficial Olof Daniel Westling han sorprendido al mundo. Aparentemente el amor pudo más que las leyes reales.

La larga relación entre la princesa heredera sueca y el entrenador terminará por fin en boda. La siempre discreta casa real de Suecia anunció, cuando nadie lo esperaba, el compromiso de la heredera del trono con su novio.

Desde primera hora de la mañana se filtró la noticia a los periódicos de la red y a las televisoras de que el rey Carlos Gustavo había convocado al Consejo del Reino a una reunión extraordinaria tras mantener una larga entrevista con el primer ministro Fredrik Reinfeldt.

Desde entonces todo fueron suposiciones sobre una posible boda y el título que el monarca concedería a Daniel. Esa espera acabó con una rueda de prensa en que los protagonistas no fueron los reyes suecos, sino los futuros esposos.

El comunicado fue escueto: 'Hoy, 24 de febrero de 2009, el palacio real ha anunciado el compromiso entre la princesa heredera Victoria y Daniel Westling. La boda está prevista para principios del verano de 2010', agrega.

Sondeo en Suecia

Según una encuesta de Novus Opinion para el canal TV4 de la televisión sueca, el 83% de los suecos están de acuerdo en que la princesa Victoria de Suecia contraiga matrimonio el próximo 2010 con su novio, el empresario Daniel Westling.

Esta opinión generalizada entre los suecos la comparten los reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia, que ven en Daniel al hombre que hace feliz a su hija y que le ayudará a llevar las riendas de su reino con éxito.

Dentro de poco más de un año se celebrará en Estocolmo una nueva boda de cuento de hadas que reunirá a todas las familias reales del mundo, como sucedió hace casi cinco años primero en Copenhague con la boda de Federico de Dinamarca y Mary Donaldson y pocos días después, el 22 de mayo en Madrid, con el enlace de Felipe y Letizia.

La sortija

El anuncio de boda y compromiso oficial culminó con júbilo, pero más tarde Victoria y Daniel volvieron a comparecer ante la prensa rosa, esta vez solos.

Ella mostró la sortija que su futuro esposo le obsequió como símbolo de amor.

Dadas las circunstancias, la heredera del trono solía decir que de momento no tiene intención de casarse, que se está preparando a fondo para ser una digna sucesora de su padre cuando llegue el momento.

La futura reina, tan discreta como enérgica, desafió a los tradicionalistas, afirmó que jamás renunciaría al trono por amor y defendió a capa y espada su relación con su entrenador de gimnasia.

Además de plantar cara a sus padres, a los monárquicos de solera, que siguen sin considerar a ese joven apropiado como consorte, y al mundo entero, supo convencer al rey, al Gobierno y al pueblo sueco de que su elegido era perfecto.

La princesa debía pedir autorización para casarse, según establece la Constitución.

Así, todos han dado luz verde a una boda, calificada de única, por ser la primera heredera del trono sueco que se cada con 'un hombre del pueblo'. La boda coincidirá con los festejos del bicentenario de la dinastía Bernadotte.

La petición

'Hacía sol y se oían nuestras pisadas sobre la nieve. Era un momento muy especial; ambos estábamos muy contentos, aunque yo estaba también bastante intranquilo. Esperaba un ‘sí’, pero no estaba del todo seguro', relató nervioso el novio. La princesa, en cambio, lo tenía muy claro. 'Mi respuesta fue un ¡sí, sí, sí!...', contó entusiasmada, mientras rodeaba el cuello de su novio con un brazo y le miraba tiernamente.

Anunció que después de la boda abandonará sus actividades para 'apoyarla'. Olof Daniel nació en Örebro hace 35 años. Es el principal propietario de una cadena de gimnasios de lujo. Aunque en un principio el rey no se mostró partidario del pretendiente de su hija, afirmó que 'es un buen hombre que trabaja duro y se toma la vida en serio'.

Al comienzo del noviazgo, la prensa lo criticó por lo arrogante y superficial que parecía.