En un partido correspondiente a la edición juvenil de la Europa League entre el Celtic de Escocia y el Valencia de España se dio una de las peores simulaciones de los últimos años en el mundo del fútbol.
Y es que durante el tiempo de descuento al final de los 90 minutos, uno de los delanteros del cuadro escocés pugnaba por conseguir el balón con el defensor valenciano David Pascual, cuando sorpresivamente este último en lugar de ir por la pelota prefirió lanzarse al césped como si lo hubiesen agredido.
Para sorpresa de todos, el árbitro central del encuentro terminó siendo engañado ya que sancionó de forma increíble una falta que jamás existió. Inmediatamente la afición le silbó por lo acontecido.
![]() Jugadores del Valencia celebrando el triunfo.
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