19/11/2024
01:26 AM

Lo mejor de la fauna de Honduras, otro símbolo nacional

El venado de cola blanca y la guara roja son el mamífero y el ave nacional de Honduras.

    Mamífero nacional

    El venado de cola banca (Odocoileus virginianus) es un cérvido de tamaño mediano, color café y cabeza grande. Los machos presentan una cornamenta que mudan cada año y las crías tienen el pelo del lomo moteado de blanco. Viven en los bosques secos, secundarios nublados y sabanas. Su hábitat abarca varios tipos de bosques, desde los fríos de Canadá hasta los tropicales de Centroamérica y Suramérica.

    Los que viven en los bosques tropicales suelen ser algo más pequeños.

    Comen hojas, frutos, y en general especies vegetales. Sus principales depredadores son el puma y el jaguar y, sobre todo, el hombre. Por eso, para preservar la especie, el Congreso Nacional de la República de Honduras lo nombró mamífero nacional mediante el Decreto No. 36-93 del 28 de junio de 1993.

    Una curiosidad del venado de cola blanca es precisamente su cola, la cual levanta en señal de alerta para prevenir a la manada.

    Ave nacional

    La guara roja, o guacamaya roja, (Ara macao) es un ave de colorido plumaje rojo, amarillo y azul que llega a medir hasta 90 cm de longitud, de los que 60 se corresponden solo con su cola. Pertenece a la familia de los loros y su hábitat comprende el territorio que va desde los bosques húmedos mexicanos hasta el noroeste de Argentina. Sin embargo en muchos lugares se encuentra extinta en su estado salvaje.

    Fue muy apreciada por las antiguas civilizaciones que habitaron Centroamérica, como lo demuestra su presencia en los monumentos mayas y la adopción de sus colores por los indígenas lencas. Desde el 28 de junio de 1993 es el ave nacional de Honduras según el Decreto No. 36-93. La guara roja se alimenta de néctar, semillas y frutas; habita en las partes altas de los árboles por los que trepa utilizando su fuerte pico. Vive unos 70 años, y desde los cuatro suele tener pareja estable de por vida.

    Por su delicado estado de conservación se eligió como ave nacional, para que representara junto con el venado de cola blanca a todas las especies de la fauna hondureña que debemos preservar y proteger.