Santa Rosa de Copán, Honduras.
En medio de aplausos y gratitud de decenas de familiares, amigos, colegas y vecinos de Santa Rosa de Copán fueron sepultados los restos mortales del subteniente Wilmer Edgardo Cruz Tobar (40) el que fue por unos meses el comandante de la estación del Cuerpo de Bomberos de Ocotepeque.
Con 16 años al servicio de la benemérita institución, el comandante Cruz Tobar se destacó por su don de servicio y fue justamente cuando prestaba ayuda comunitaria que fue sorprendido por la muerte.
El subteniente perdió la vida el pasado jueves, cuando junto con dos de sus bomberos se disponía a limpiar una cisterna del Palacio Judicial de Ocotepeque.
El gas que emanó de una bomba achicadora con la que pretendían extraer el agua de la cisterna fue lo que le causó la muerte al instante al comandante y su bombero Henry Noél Reyes y al jardinero de los juzgados, Tiburcio Pérez, quien apoyaba en la limpieza.
El socorrista Alex Maldonado Solís logró sobrevivir y ayer fue trasladado a un centro asistencial en Tegucigalpa, adonde es atendido por médicos especialistas.
Masivo velatorio
El cadáver del comandante Cruz Tobar fue trasladado la misma tarde del jueves a Santa Rosa de Copán, su ciudad de origen y donde fungió por muchos años como comandante del Cuerpo de Bomberos.
Al velatorio llegaron comandantes y bomberos de todo el país, quienes en medio de un acto solemne reconocieron a Cruz Tobar su entrega y dedicación. Asistieron también michas personas humildes a quienes Cruz Tobar sirvió desde regalarles una cubeta con agua, hasta a quienes con su servicio les salvó la vida.
Una Bandera Nacional cubrió el ataúd durante su velatorio y honras fúnebres, en señal del dolor de la Patria ante la pérdida de uno de sus mejores hijos. Ayer por la tarde se procedió a su sepelio y el féretro fue trasladado al cementerio municipal en uno de los camiones del Cuerpo de Bomberos.
“Wilmer dedicó toda su vida a servir, esa era su visión de vida, vivía sirviendo y ayudando a los demás.
Por ello este día la cantidad de personas en su entierro es impresionante”, indicó el comandante del Cuerpo de Bomberos de Copan, Mayor Edgardo Orellana.
Cruz Tobar tuvo una larga carrera en la institución de socorro, por su experiencia y colaboración logró escalar varios peldaños. “Cómo todos, soñaba ser comandante.
A finales del año pasado ascendió a oficial y por su experiencia y don de servicio fue enviado a Ocotepeque como comandante”, relató Orellana. Cruz Tobar estaba casado con Wendy Arita, con quien procreó tres hijas. Su esposa también esta ligada a la institución de socorro, pues funge como secretaria de la estación de bomberos de Santa Rosa de Copán.
En medio de aplausos y gratitud de decenas de familiares, amigos, colegas y vecinos de Santa Rosa de Copán fueron sepultados los restos mortales del subteniente Wilmer Edgardo Cruz Tobar (40) el que fue por unos meses el comandante de la estación del Cuerpo de Bomberos de Ocotepeque.
Con 16 años al servicio de la benemérita institución, el comandante Cruz Tobar se destacó por su don de servicio y fue justamente cuando prestaba ayuda comunitaria que fue sorprendido por la muerte.
El subteniente perdió la vida el pasado jueves, cuando junto con dos de sus bomberos se disponía a limpiar una cisterna del Palacio Judicial de Ocotepeque.
El gas que emanó de una bomba achicadora con la que pretendían extraer el agua de la cisterna fue lo que le causó la muerte al instante al comandante y su bombero Henry Noél Reyes y al jardinero de los juzgados, Tiburcio Pérez, quien apoyaba en la limpieza.
El socorrista Alex Maldonado Solís logró sobrevivir y ayer fue trasladado a un centro asistencial en Tegucigalpa, adonde es atendido por médicos especialistas.
Masivo velatorio
El cadáver del comandante Cruz Tobar fue trasladado la misma tarde del jueves a Santa Rosa de Copán, su ciudad de origen y donde fungió por muchos años como comandante del Cuerpo de Bomberos.
Al velatorio llegaron comandantes y bomberos de todo el país, quienes en medio de un acto solemne reconocieron a Cruz Tobar su entrega y dedicación. Asistieron también michas personas humildes a quienes Cruz Tobar sirvió desde regalarles una cubeta con agua, hasta a quienes con su servicio les salvó la vida.
Una Bandera Nacional cubrió el ataúd durante su velatorio y honras fúnebres, en señal del dolor de la Patria ante la pérdida de uno de sus mejores hijos. Ayer por la tarde se procedió a su sepelio y el féretro fue trasladado al cementerio municipal en uno de los camiones del Cuerpo de Bomberos.
“Wilmer dedicó toda su vida a servir, esa era su visión de vida, vivía sirviendo y ayudando a los demás.
Por ello este día la cantidad de personas en su entierro es impresionante”, indicó el comandante del Cuerpo de Bomberos de Copan, Mayor Edgardo Orellana.
Cruz Tobar tuvo una larga carrera en la institución de socorro, por su experiencia y colaboración logró escalar varios peldaños. “Cómo todos, soñaba ser comandante.
A finales del año pasado ascendió a oficial y por su experiencia y don de servicio fue enviado a Ocotepeque como comandante”, relató Orellana. Cruz Tobar estaba casado con Wendy Arita, con quien procreó tres hijas. Su esposa también esta ligada a la institución de socorro, pues funge como secretaria de la estación de bomberos de Santa Rosa de Copán.