Tegucigalpa, Honduras.
Como si se tratara de una película de terror, varios clientes y empleados de un restaurante en Lomas del Toncontín de Tegucigalpa vivieron una verdadera pesadilla cuando sujetos fuertemente armados y encapuchados interrumpieron el lugar y comenzaron a disparar. El hecho ocurrió el pasado domingo a las 3:30 pm
En el parqueo del restaurante matan de un disparo en la cabeza al guardia de seguridad Mario Ruiz Torres (20), justo donde dos hermanos fueron acribillados el jueves pasado supuestamente por negarse a pagar extorsión. En el lugar del crimen se c ontabilizaron 29 casquillos de arma automática M-16.
Un video evidencia como los sujetos comienzan su acción criminal desde el estacionamiento donde hacen varios disparos. En medio del ataque otras tres personas que transitaban por la zona en un vehículo turismo color negro marca Honda y otro tipo pick-up doble cabina resultaron heridas. Ambos vehículos presentaban varios impactos de bala.
Luego entran al restaurante, comienzan a amenzar con sus pistolas y a asaltar a los clientes quitándoles celulares y pertencias muchos, desesperados, salen corriendo junto con algunos empleados cuando dos de ellos ingresan a la cocina.
Una pareja que esta en una de las mesas los ve temorosos pero no reaccionan, se quedan allí, solo los observan y se dirigen a un cliente a quien al parecer le hacen una pregunta, él hombre se para y levanta sus manos en señal de rendición, de pronto le infieren un disparo cayendo de inmediato al suelo. Se conoció que el hombre fue identificado como Jorge Alberto Sandres, quien fue llevado al Hospital Escuela pero lastimosamente murió.
Los asesinos aprovecharon el momento en que personal de la Policía Nacional que permanece en el lugar se había desplazado a capturar a dos delincuentes que andaban armados. Los sujetos luego de perpetrar los crímenes huyeron del lugar en un vehículo doble cabina.
El subcomisionado Roger Alberto Maradiaga Borjas comentó que de forma preliminar se puede establecer que el objetivo era el negocio porque lo primero que hicieron fue quitarle la vida al guardia de seguridad para que no reaccionara y cometer el acto delictivo.
Como si se tratara de una película de terror, varios clientes y empleados de un restaurante en Lomas del Toncontín de Tegucigalpa vivieron una verdadera pesadilla cuando sujetos fuertemente armados y encapuchados interrumpieron el lugar y comenzaron a disparar. El hecho ocurrió el pasado domingo a las 3:30 pm
En el parqueo del restaurante matan de un disparo en la cabeza al guardia de seguridad Mario Ruiz Torres (20), justo donde dos hermanos fueron acribillados el jueves pasado supuestamente por negarse a pagar extorsión. En el lugar del crimen se c ontabilizaron 29 casquillos de arma automática M-16.
Un video evidencia como los sujetos comienzan su acción criminal desde el estacionamiento donde hacen varios disparos. En medio del ataque otras tres personas que transitaban por la zona en un vehículo turismo color negro marca Honda y otro tipo pick-up doble cabina resultaron heridas. Ambos vehículos presentaban varios impactos de bala.
Luego entran al restaurante, comienzan a amenzar con sus pistolas y a asaltar a los clientes quitándoles celulares y pertencias muchos, desesperados, salen corriendo junto con algunos empleados cuando dos de ellos ingresan a la cocina.
Una pareja que esta en una de las mesas los ve temorosos pero no reaccionan, se quedan allí, solo los observan y se dirigen a un cliente a quien al parecer le hacen una pregunta, él hombre se para y levanta sus manos en señal de rendición, de pronto le infieren un disparo cayendo de inmediato al suelo. Se conoció que el hombre fue identificado como Jorge Alberto Sandres, quien fue llevado al Hospital Escuela pero lastimosamente murió.
Los asesinos aprovecharon el momento en que personal de la Policía Nacional que permanece en el lugar se había desplazado a capturar a dos delincuentes que andaban armados. Los sujetos luego de perpetrar los crímenes huyeron del lugar en un vehículo doble cabina.
El subcomisionado Roger Alberto Maradiaga Borjas comentó que de forma preliminar se puede establecer que el objetivo era el negocio porque lo primero que hicieron fue quitarle la vida al guardia de seguridad para que no reaccionara y cometer el acto delictivo.
 Técnicos de la DPI mientras hacían las investigaciones.
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