La Esperanza, Intibucá, Honduras.
Las contradicciones en declaraciones a los investigadores que conocen el caso del asesinato de la ambientalista Berta Cáceres, provocaron que en el proceso de investigación el Ministerio Público va a carear al mexicano Gustavo Enrique Castro Soto, que estaba con ella cuando fue asesinada, con otro de los testigos.
Amparados en las diligencias administrativas, los investigadores agotan todos los recursos para tener pruebas contundentes que los aproximen a lo que ocurrió la noche del 3 de marzo en la vivienda de la líder lenca. “Promovemos acciones administrativas en busca de elementos que nos sirvan para determinar las acusaciones contra los involucrados en el asesinato de Berta Cáceres. Se trabaja con mucha responsabilidad el caso”, dijo uno de los investigadores.
Como parte de las evidencias en poder de los investigadores figura una prenda íntima del mexicano que se recolectó en la escena del crimen, la que será enviada a Medicina Forense para realizar los análisis correspondientes.
Alerta migratoria
Con instrucciones de la jueza primera de Letras de Intibucá, Victorina Flores Orellana, y basándose en una resolución de audiencia presentada con fecha del 5 de marzo de 2016, a las 8:30 pm se le decretó al testigo protegido identificado con la clave ABC-03-03-2016 alerta migratoria judicial, que consiste en la prohibición de salir del país por un término de 30 horas a partir de esa fecha. La orden se emite por las diligencias investigativas que se efectúan por el crimen.
Ayer a las 5:00 am, el mexicano llegó al aeropuerto Toncontín para abordar el vuelo 480, que salía con destino a México haciendo escala en El Salvador; sin embargo, investigadores de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) impidieron su salida. La embajadora y la cónsul de México acompañaron al extranjero y retornaron de nuevo a la sede diplomática de ese país en Tegucigalpa cuando eran las 5:40 am.
“En las próximas horas, el ciudadano de origen mexicano compareció para que los fiscales hagan el segundo interrogatorio en el cual estuvo presente otro testigo. La información es útil para aclarar la información que brindaron”, dijo el agente.
La organización mexicana Otros Mundos pidió ayer a las organizaciones y a los defensores de derechos humanos que “vigilen la situación de Gustavo Castro, quien fue víctima de un intento de asesinato”.
Ayer en el vuelo 735 de la línea aérea Avianca llegó procedente de Guatemala Óscar Arturo Castro Soto, hermano del mexicano que acompañaba a Berta Cáceres al momento de su muerte.
Piden apoyo
El presidente Juan Orlando Hernández solicitó en nombre del Estado de Honduras que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos acompañe todo el proceso de seguimiento e investigación en torno a la muerte de la dirigente indígena.
“En el espíritu de cooperación, colaboración y transparencia hacia los órganos de protección de los derechos humanos y la sociedad hondureña en general, solicitamos a su Excelencia el pronto acompañamiento de su oficina al proceso de seguimiento e investigación del caso de la muerte de la defensora de derechos humanos Berta Cáceres”, dice el presidente Hernández en la carta que se envió a Zeid Ra´Ad Al Hussein, titular del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU.
Se conoció que dos agentes del Buró Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI) llegaron al país para sumarse a las investigaciones.
Las contradicciones en declaraciones a los investigadores que conocen el caso del asesinato de la ambientalista Berta Cáceres, provocaron que en el proceso de investigación el Ministerio Público va a carear al mexicano Gustavo Enrique Castro Soto, que estaba con ella cuando fue asesinada, con otro de los testigos.
Amparados en las diligencias administrativas, los investigadores agotan todos los recursos para tener pruebas contundentes que los aproximen a lo que ocurrió la noche del 3 de marzo en la vivienda de la líder lenca. “Promovemos acciones administrativas en busca de elementos que nos sirvan para determinar las acusaciones contra los involucrados en el asesinato de Berta Cáceres. Se trabaja con mucha responsabilidad el caso”, dijo uno de los investigadores.
Como parte de las evidencias en poder de los investigadores figura una prenda íntima del mexicano que se recolectó en la escena del crimen, la que será enviada a Medicina Forense para realizar los análisis correspondientes.
Aurelio Molina (27). El joven detenido el viernes anterior como sospechoso fue liberado el sábado.
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Con instrucciones de la jueza primera de Letras de Intibucá, Victorina Flores Orellana, y basándose en una resolución de audiencia presentada con fecha del 5 de marzo de 2016, a las 8:30 pm se le decretó al testigo protegido identificado con la clave ABC-03-03-2016 alerta migratoria judicial, que consiste en la prohibición de salir del país por un término de 30 horas a partir de esa fecha. La orden se emite por las diligencias investigativas que se efectúan por el crimen.
Ayer a las 5:00 am, el mexicano llegó al aeropuerto Toncontín para abordar el vuelo 480, que salía con destino a México haciendo escala en El Salvador; sin embargo, investigadores de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) impidieron su salida. La embajadora y la cónsul de México acompañaron al extranjero y retornaron de nuevo a la sede diplomática de ese país en Tegucigalpa cuando eran las 5:40 am.
“En las próximas horas, el ciudadano de origen mexicano compareció para que los fiscales hagan el segundo interrogatorio en el cual estuvo presente otro testigo. La información es útil para aclarar la información que brindaron”, dijo el agente.
La organización mexicana Otros Mundos pidió ayer a las organizaciones y a los defensores de derechos humanos que “vigilen la situación de Gustavo Castro, quien fue víctima de un intento de asesinato”.
Ayer en el vuelo 735 de la línea aérea Avianca llegó procedente de Guatemala Óscar Arturo Castro Soto, hermano del mexicano que acompañaba a Berta Cáceres al momento de su muerte.
Piden apoyo
El presidente Juan Orlando Hernández solicitó en nombre del Estado de Honduras que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos acompañe todo el proceso de seguimiento e investigación en torno a la muerte de la dirigente indígena.
“En el espíritu de cooperación, colaboración y transparencia hacia los órganos de protección de los derechos humanos y la sociedad hondureña en general, solicitamos a su Excelencia el pronto acompañamiento de su oficina al proceso de seguimiento e investigación del caso de la muerte de la defensora de derechos humanos Berta Cáceres”, dice el presidente Hernández en la carta que se envió a Zeid Ra´Ad Al Hussein, titular del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU.
Se conoció que dos agentes del Buró Federal de Investigación de Estados Unidos (FBI) llegaron al país para sumarse a las investigaciones.