El seguimiento a una red internacional de narcotráfico que desde hace ocho meses era vigilada por las unidades de inteligencia antinarcóticos de la Policía Nacional y el Ministerio Público en Honduras, permitió la coordinación con autoridades policiales en El Salvador para interceptar a dos hondureños el pasado viernes en el kilómetro 93, en San Ignacio, El Salvador.
Héctor Geovany Arita Castañeda (49), maestro de educación primaria y director de la escuela Dr. Salvador Corleto, ubicada en la colonia Las Américas en Ocotepeque y Tania Yamileth Matías Murcia (25), son considerados por la Policía parte de una banda de narcotraficantes que opera en Honduras con vínculos en El Salvador y Guatemala con conexiones con grupos de México y Colombia.
Según los investigadores, son al menos 20 personas las que integran la red que enviaba los paquetes con cocaína desde El Paraíso, Copán, adonde el director del centro educativo tenía como propósito trasladar la droga hasta Apopa, en San Salvador, donde era recibida por miembros de la MS, dijeron las autoridades.
“Son ocho meses de trabajo con unidades infiltradas en el corredor del occidente, las que nos develan el operar de una red grande de narcotráfico internacional”, dijo el agente de la unidad antinarcóticos.
Héctor Geovany Arita y Tania Yamileth Matías fueron recluidos en el Centro Penal de Chalatenango, ambos son acusados por tráfico de drogas, en donde la audiencia inicial se programó para el próximo jueves en horas de la mañana.
La cocaína incautada en el centro educativo.
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Desde julio de 2015, los equipos se instalaron en Ocotepeque y comenzaron a darle seguimiento a las actividades del docente y de toda la estructura que poco a poco fue perfilada por los investigadores.
“Se detectó que la droga, que semanalmente era enviada a Ocotepeque, provenía de El Paraíso, Copán, donde se tienen identificados a los miembros de la organización que durante varios años han utilizado la zona para sus operaciones ilícitas. Los envíos llegaban vía terrestre y el docente era el que almacenaba y distribuía hacia El Salvador y Ocotepeque. Los grandes envíos salían para el vecino país, pero localmente identifican a Tanya Yamileth como una de las distribuidoras de droga”, explicó el agente.
En el seguimiento se detectó la presencia de varios mexicanos y colombianos, los que según los agentes llegan frecuentemente a Ocotepeque para pagar y recibir dinero producto de las operaciones ilícitas.
Tras concretar los pagos, los extranjeros, según el reporte investigativo, se movilizan hacia Guatemala y otros a San Pedro Sula.
Para capturar al docente la semana del 8 de febrero, los investigadores le seguían los pasos. Cuando cruzó la frontera de El Poy, otro equipo de la unidad antinarcóticos estaba lista, tras cruzar la aduana lo siguieron, cuando había avanzado ocho kilómetros en las cercanías de San Ignacio fue sorprendido. Primero un registro normal, luego la inspección con perros antidrogas dio positivo y fue cuando se encontraron los cinco paquetes.