Tegucigalpa, Honduras.
En mayo pasado el primer extraditado hondureño hacia Estados Unidos, Carlos Arnaldo Lobo cumplió un año de estar recluido en una cárcel federal de máxima seguridad en el estado de Florida.
Junto a Lobo, son 10 hondureños más acusados de narcotráfico que están enfrentando la justicia en ese país norteamericano.
Además de Lobo, Juving Suazo y los hermanos Miguel Arnulfo, Luis Alonso y Digna Azucena Valle Valle, están recluidos en el mismo estado.
También los hermanos identificados como líderes de la banda de Los Cachiros, Javier Heriberto y Delvis Leonel Rivera Maradiaga, quienes se entregaron a la justicia estadounidense en enero de este año.
“La Corte Suprema de Justicia desconoce el nombre de las cárceles federales adonde han sido recluidos los extraditados. En la petición de extradición se menciona la Corte Federal que lo requiere.
Pero una vez que se culmina el proceso de extradición aquí en el país, el hondureño es entregado a las autoridades estadounidenses y hasta allí llega la participación de la Corte Suprema”, explicó el director de comunicaciones del Poder Judicial, Melvin Duarte.
En el estado de Virginia están recluidos los esposos extraditados José Inocente Valle Valle y Marlen Griselda Amara Argueta.
En Nueva York lo están Héctor Emilio Fernández Rosa y el recién capturado en Haití, Fabio Lobo Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa.
Las visitas
Los hondureños extraditados, y los demás acusados por narcotráfico están sometidos a un régimen estricto de visitas que abarca solo a familiares y amistades cercanas, así como sus abogados defensores y hasta cónsules con jurisdicción en el estado que están recluidos.
La vicecanciller de la República, María Andrea Matamoros, dijo a LA PRENSA que los consulados en Estados Unidos están al pendiente de la situación de todos los recluidos en ese país, incluidos los extraditados.
Sin embargo, explicó que la situación legal “es muy del conocimiento de las autoridades estadounidenses por lo que Honduras no puede abarcar ese ámbito pero sí las condiciones de ellos y sus derechos humanos”.
Según las condiciones de extradición entre EUA y Honduras, no se les podrá imponer pena de muerte o penas aflictivas, inhumanas o degradantes a los sentenciados.
Además, EUA deberá informar al Estado de Honduras sobre el resultado del proceso penal incoado contra los extraditados.
En mayo pasado el primer extraditado hondureño hacia Estados Unidos, Carlos Arnaldo Lobo cumplió un año de estar recluido en una cárcel federal de máxima seguridad en el estado de Florida.
Junto a Lobo, son 10 hondureños más acusados de narcotráfico que están enfrentando la justicia en ese país norteamericano.
Además de Lobo, Juving Suazo y los hermanos Miguel Arnulfo, Luis Alonso y Digna Azucena Valle Valle, están recluidos en el mismo estado.
También los hermanos identificados como líderes de la banda de Los Cachiros, Javier Heriberto y Delvis Leonel Rivera Maradiaga, quienes se entregaron a la justicia estadounidense en enero de este año.
“La Corte Suprema de Justicia desconoce el nombre de las cárceles federales adonde han sido recluidos los extraditados. En la petición de extradición se menciona la Corte Federal que lo requiere.
Pero una vez que se culmina el proceso de extradición aquí en el país, el hondureño es entregado a las autoridades estadounidenses y hasta allí llega la participación de la Corte Suprema”, explicó el director de comunicaciones del Poder Judicial, Melvin Duarte.
En el estado de Virginia están recluidos los esposos extraditados José Inocente Valle Valle y Marlen Griselda Amara Argueta.
En Nueva York lo están Héctor Emilio Fernández Rosa y el recién capturado en Haití, Fabio Lobo Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa.
Las visitas
Los hondureños extraditados, y los demás acusados por narcotráfico están sometidos a un régimen estricto de visitas que abarca solo a familiares y amistades cercanas, así como sus abogados defensores y hasta cónsules con jurisdicción en el estado que están recluidos.
La vicecanciller de la República, María Andrea Matamoros, dijo a LA PRENSA que los consulados en Estados Unidos están al pendiente de la situación de todos los recluidos en ese país, incluidos los extraditados.
Sin embargo, explicó que la situación legal “es muy del conocimiento de las autoridades estadounidenses por lo que Honduras no puede abarcar ese ámbito pero sí las condiciones de ellos y sus derechos humanos”.
Según las condiciones de extradición entre EUA y Honduras, no se les podrá imponer pena de muerte o penas aflictivas, inhumanas o degradantes a los sentenciados.
Además, EUA deberá informar al Estado de Honduras sobre el resultado del proceso penal incoado contra los extraditados.
En detalle
Visitas
Solo el Departamento de Justicia de EUA puede autorizarlas.
Acusados
Solo cinco visitas al mes reciben los procesados por narcotráfico.
Vigilancia
Un oficial carcelario vigila de cerca la visita de los acusados.
Contacto
No existe contacto físico en visitas, ni siquiera saludo con la mano.
Lista
Recluso enlista a familiares y amigos que pueden visitarlo.
Consulados
Los cónsules hondureños pueden visitar a los extraditados.