El Progreso, Yoro.
Aprovechando la fragilidad de las paredes de adobe del viejo centro penal de Yoro y la escasa vigilancia, seis reos que purgan penas por varios delitos se dieron a la fuga la madrugada de ayer.
Los fugados son Elmer Antonio Castro, sentenciado a 11 años por violación, José Adan Palma, sentenciado a 15 años por homicidio, Rigoberto Gonzales Murillo, procesado por homicidio, José Manuel Rivera, procesado por homicidio, Darwin Javier Gonzales, procesado por robo, y Lázaro Antonio Ortegda, procesado por violación.
Según versiones de los custodios de turno, el escape habría ocurrido minutos antes de las 2:00 am, hora en que escucharon movimiento en el costado oeste del recinto por donde se encuentra la sede de la Cruz Roja.
El ruido hizo que los celadores fuesen a ver el lugar, pero ya era tarde, los hombres habían abierto un boquete en la pared y se habían ido.
El ladrido de los perros guio por un momento a los custodios y agentes de la Policía Nacional, cuya sede está pegada al penal, estos salieron a la calle y en dirección adonde se escuchaba a los canes; pero hasta ayer no había pistas de estos.
Las autoridades advirtieron a los pobladores del municipio y alrededores tener cuidado por los peligrosos delincuentes. Vecinos del lugar dijeron que los presidiarios se pasan hasta de honestos al no escaparse, pues el inmueble no solo representa un riesgo para los custodios, sino para los mismos presos, su estructura con más de medio siglo de construida, paredes de adobe agrietadas y con un techo que está a punto de caer es una permanente amenaza para todos los que allí permanecen.
 Por este hoyo que abrieron en una de las paredes escaparon los seis hombres.
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