Tegucigalpa, Honduras.
Luego de dos días de trabajo en el Centro Pedagógico Renacimiento en Támara, un equipo de operadores de justicia encontró dos cuerpos enterrados en una fosa clandestina, en el interior de ese recinto para rehabilitación de menores.
El hallazgo del primer cuerpo fue confirmado a las 3:08 pm, mientras que el segundo fue encontrado a las 4:15 pm en una fosa de un metro de profundidad.
Las dos osamentas estaban ubicadas en un predio cercano al muro perimetral que colinda con la Penitenciaría Nacional Femenina.
La operación fue coordinada por la Agencia Técnica de Inteligencia Criminal (Atic), la que se encargó de ejecutar las acciones en el interior del centro de menores, adonde utilizaron equipo especializado para detectar cualquier objeto en tierra.
Los especialistas se hicieron acompañar de un técnico especialista de la Embajada de Estados Unidos. Además, el Centro de Ciencias Forenses (CCF), designó a su personal especializado, incluidos técnicos, fotógrafos forenses y médicos forenses para llevar a cabo la exhumación.
Tras varias horas de excavación fue encontrado el primer cuerpo enterrado y una hora con siete minutos más tarde se descubrió el segundo, los que fueron remitidos a Medicina Forense para practicar estudios científicos orientados a tratar de identificar a quién pertenecen y las causas de muerte. Se presume que se trata de dos menores de edad.
La identificación de los cuerpos no será un proceso inmediato en razón del estado en que se encuentran, informó Lorena Cálix, portavoz del Ministerio Público.
Desde el domingo, los operadores de justicia se trasladaron hasta el centro de menores para indagar sobre una fosa clandestina en el interior de Renacimiento.
