Si en la costa norte los compatriotas que se dedican al cultivo de banano enfrentan diversas problemáticas, tales como la falta de financiamiento por parte de la banca privada en razón de la inseguridad prevaleciente en las fincas y la ausencia de suficientes bordos para el control de inundaciones, lo que ha provocado la pérdida de más de 5,000 empleos, sin por ello recibir asistencia por parte del gobierno pese a la importancia de este sector para la economía nacional y el hecho de que el banano es un sector altamente productivo, debido a su rápido crecimiento hasta su maduración, brindando cada mata sus primeras frutas en solo ocho meses y cosechas subsiguientes en seis meses, compensando la inversión inicial, este rubro tiende a disminuir, al punto que ya no abastece la totalidad de la demanda interna, debiendo importarse desde Guatemala con la consiguiente fuga de divisas.
Los caficultores, por su parte, hacen frente a la escasez de mano de obra al momento de la cosecha, lo que los obliga a contratarla en los países vecinos, además del creciente deterioro de caminos de acceso y carreteras, lo que impacta en sus unidades de transporte y en las demoras para trasladar el grano a los compradores.
Tanto bananos como café representan dos cultivos históricos, esenciales en el sector agrícola nacional, por lo que merecen la pronta ayuda estatal, ya que sus ingresos permiten la subsistencia de miles de familias en distintos puntos de nuestra geografía.
En la zona sur, Choluteca y Valle, las empresas dedicadas al cultivo y exportación de camarón fresco, recién han recibido la noticia de que México ha cerrado su frontera a la importación de este crustáceo procedente de Honduras, alegando sus camaroneros que varias naciones están triangulando producto procedente de Ecuador, lo que es refutado por la Asociación Nacional de Acuicultores de Honduras (Andah), que exporta a la república norteña más de $105 millones anualmente, siendo el segundo destino de venta para la camaricultura nacional, solo superado por las compras procedentes de Taiwán, cuyos precios superan con mucho los pagados por China, lo que debe ser tratado por nuestros representantes en las actuales negociaciones del Tratado de Libre Comercio con ese país asiático.
El camarón representa el primer rubro de importancia en la zona meridional hondureña y el cuarto en la oferta exportable, generando $265.7 millones.
