Un aluvión de críticas han recaído este miércoles sobre el expresidente estadounidense George W Bush, quien fue uno de los invitados especiales, junto a Barack y Michelle Obama, al funeral de los 5 policías abatidos en la masacre en Dallas, ocurrida en un contexto de violencia racial en ese país.
El exmandatario dio un breve discurso en el que destacó la valentía de la policía para proteger a los ciudadanos en momentos de crisis.
'Su valentía es nuestra protección (...). Es una poderosa inspiración para el resto del país', afirmó Bush, residente del área de Dallas, en la ceremonia. 'Hoy, la nación está de luto, pero aquellos que consideramos Dallas nuestra casa hemos perdido cinco miembros de nuestra familia', agregó el cuadragésimo tercer presidente estadounidense.
Sin embargo, más que sus palabras, lo que destacó de su participación en el funeral, fue un raro momento en el que Bush comenzó a 'bailar' cuando se entonaba el Himno de la Batalla de la República (Gloria, Aleluya), y mientras se encontraba tomado de la mano de Michelle, y su esposa Laura.
Por supuesto, las imágenes del incidente se viralizaron rápidamente en las redes sociales y las críticas no tardaron en llegar.
|
|
|