Corea del Norte aseguró el viernes que las nuevas sanciones impuestas contra su líder, Kim Jong-Un, por parte de Estados Unidos suponen una 'declaración de guerra' y prometió tomar fuertes medidas de represalia.
La decisión de Estados Unidos constituye 'el acto más hostil' y una 'abierta declaración de guerra' contra Corea del Norte, aseguró el ministro norcoreano de Exteriores en un comunicado difundido por la agencia de prensa oficial del régimen.
Las nuevas sanciones de EUA por las violaciones de derechos humanos en Corea del Norte son las primeras que ponen bajo el punto de mira al líder Kim Jong-un, lo que amenaza con elevar la tensión y generar conflictos militares.
La medida anunciada el martes por el Departamento del Tesoro incluye por primera vez a Kim en la lista de líderes amonestados por Washington por abusos de derechos humanos, como el sirio Bachar Al Asad, el libio Muamar Al Gadafi, el iraquí Sadam Hussein y el zimbabuense Robert Mugabe.
Por ello se espera una respuesta fuerte de Corea del Norte, cuyo régimen se ha caracterizado no solo por su extrema devoción a los dirigentes de la dinastía Kim sino también por su intransigencia con cualquier acción que pueda 'herir la dignidad del liderazgo supremo', tal y como suelen expresar sus medios estatales
'Sin duda las sanciones elevarán la tensión entre Washington y Pyongyang, y pondrán a prueba las relaciones bilaterales Norte-Sur, lo que puede generar una importante amenaza a los esfuerzos realizados hasta ahora para buscar el diálogo y la paz', indicó a Efe el académico surcoreano Chang Yong-seok en Seúl.