Al menos cuatro personas murieron de calor durante el fin de semana en Arizona, en el suroeste de Estados Unidos, donde se han registrado temperaturas infernales, según las autoridades.
Tres senderistas y una ciclista murieron en Phoenix, Tucson y Mesa a raíz de una ola de calor.
'Estamos por batir nuestro récord histórico' de calor de 50 grados centígrados en Phoenix de 1990, indicó el lunes a la AFP el portavoz de los bomberos de Phoenix, Larry Subervi, y precisó que las temperaturas habían alcanzado los 49 grados en los últimos días.
Una mujer de 28 años que había salido a hacer un recorrido en bicicleta en los alrededores de la ciudad de Phoenix 'fue arrollada por el calor' a pesar de ser 'experimentada' y haber llevado 'mucha agua', informó Subervi.
En Mesa la víctima tenía 25 años, y en Tucson una adolescente de 18 años murió en el camino tras haberse perdido en el desierto y quedado sin agua. Los inmigrantes que cruzan por este lugar se exponen a graves riesgos debido a las altas temperaturas.
Las temperaturas extremas en el suroeste de Estados Unidos también han causado grandes incendios forestales en Nuevo México, California y Arizona.