El Ministerio de Salud de Brasil informó hoy que hay 508 casos confirmados de bebés con microcefalia o con alteraciones del sistema nervioso, que se sospecha que pueden estar vinculados con el virus del Zika.
Un boletín del Ministerio explicó que los casos se registraron entre el 22 de octubre y el 13 de febrero pasados.
La cartera de Salud explicó que en la última semana fueron confirmados 46 casos de microcefalia e indicó que ha descartado 837 y que 3.935 sospechosos continúan bajo investigación.
En total han sido notificados 5.280 posibles casos de microcefalia u otras alteraciones del sistema nervioso desde que en octubre pasado el Gobierno decidió establecer un estricto control debido al aumento de informes de malformaciones en recién nacidos.
Las autoridades sanitarias brasileñas vinculan el aumento de los casos de esta dolencia con la propagación del zika, uno de los virus transmitido por el mosquito Aedes aegypti.
El boletín también señala que de las 108 muertes de bebés registradas desde octubre, en 27 casos se confirmó que la microcefalia provocó el fallecimiento y en otros 11 se descartó esta causa. El resto continúa bajo investigación.
La semana pasada eran 24 las muertes por microcefalia confirmadas y 59 las que se investigaban. De acuerdo con el boletín del Ministerio de Salud, el 60,1 % de los casos fue notificado en 2015 y el restante en lo que va de año.
De todos los estados que conforman el país, tan solo dos, Amapá y Amazonas, en la región norte, no han notificado hasta el momento ningún caso sospechoso.
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El Gobierno brasileño, que declaró el estado de emergencia sanitaria el año pasado por el brote de zika, ha impulsado diversas acciones para tratar de eliminar los criaderos del mosquito transmisor del virus, el Aedes aegypti, que también contagia el dengue y el chikunguña.
El virus del Zika circula actualmente en gran parte de países de Latinoamérica y el Caribe y, si bien causa síntomas leves entre la mayor parte de infectados, el gran temor tiene que ver con su probable relación con casos de microcefalia y el síndrome neurológico de Guillain Barré.