Nueva York, Estados Unidos
Roberto Ramón Castillo, primo del expresidente de Honduras Rafael Leonardo Callejas, confirmó la liberación del exmandatario hondureño vinculado al caso Fifagate por parte de la Fiscalía General de Estados Unidos.
'Hace unos 40 minutos salimos del juzgado, ya se pagó la fianza y vamos en camino al hotel. Él -Rafael- ya está más tranquilo al igual que el resto de la familia que lo acompaña. Estamos contentos. Fue un juicio muy rápido', dijo Castillo en referencia a la audiencia en la que Callejas fue liberado tras pagar una fianza de 4 millones de dólares.
Callejas estuvo interno en el Centro de Detenciones de Brooklyn durante dos días y luego de declararse no culpable ante la justicia federal de Nueva York por los cargos en su contra en el escándalo de corrupción de la FIFA.
Castillo confirmó que el exmandatario pagó en efectivo el 21 por ciento de la fianza -cerca de 810 mil dólares equivalentes a casi 18 millones de lempiras- para lograr su libertad.
Las condiciones
Agregó que Callejas estará en arresto domiciliario bajo el cual solo se le permitirá ir a los lugares dentro de la ciudad en un radio de 20 millas de distancia de la corte.
Callejas podrá verse con sus representantes legales para preparar la audiencia 'que será en marzo del 2016', podrá recibir visitas de su familia pero no podrá dar entrevista ni salir del país ya que se le retiraron los documentos y se le colocó un brazalete electrónico para controlar sus movimientos.
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El proceso
Según documentos presentados en la causa penal iniciada por la fiscalía federal de Estados Unidos contra 39 personas y dos compañías en el denominado 'FIFAgate', Callejas fue dejado en libertad a cambio de una fianza por 4 millones de dólares, de los cuales 810.000 en efectivo.
Callejas, presidente de Honduras entre 1990 y 1994 y titular de la Federación Nacional Autónoma de Fútbol de Honduras (Fenafuth) hasta agosto pasado, rechazó el martes los ocho cargos que se le imputan por asociación delictiva, fraude y lavado de dinero.
El exmandatario de 72 años y uno de los 16 nuevos procesados en el escándalo de corrupción de la FIFA que estalló en mayo pasado, fue detenido el lunes por el FBI en Miami (sureste), ciudad a la que viajó en un vuelo privado desde Tegucigalpa.
La fiscalía federal de Estados Unidos lo acusó el pasado 3 de diciembre de ocho cargos, entre ellos haber recibido sobornos por un total de 1,6 millones de dólares para conceder derechos de transmisión de los partidos disputados por la selección hondureña.
