El Cairo.
El secretario de Estado de EUA, John Kerry, finalizó su gira por Oriente Medio con un regusto agridulce. Por un lado ha logrado que 10 naciones árabes se sumen a la alianza contra Isis. Por el otro, no ha conseguido más que promesas vagas.
Kerry reclamó más cooperación para luchar contra los milicianos del Isis tras entrevistarse con el presidente egipcio, general Abdelfatá al Sisi. Este le respondió que colaborará si Estados Unidos se implica en la lucha antiterrorista dentro de su país, especialmente contra los grupúsculos que operan en la península del Sinaí.
Al Sisi se mostró ambiguo en sus planes, pero los medios locales dan por hecho que no habrá envío de tropas ni de armas a Siria ni a Irak.
Advertencia de Irán
El presidente del Parlamento iraní, Alí Lariyaní, advirtió a Washington de no atacar territorio sirio “bajo el pretexto” de su lucha contra los islamistas del Estado Islámico.
“Tengan cuidado de no cometer otro error y prender fuego en la región llevando a cabo misiones en otros países bajo el pretexto de luchar contra Isis”, dijo Lariyaní a la cadena de televisión nacional Irin. Lariyaní criticó la coalición impulsada por el presidente de EUA, Barack Obama. “¿Dónde está la lógica? ¿Es que no existe el orden internacional en este mundo?. Pidan permiso al Consejo de Seguridad”, sugirió.
