24/11/2024
02:00 AM

Médicos Sin Fronteras se retiran de las afueras de Damasco por violencia

Los galenos exigen que se deje a enfermos y heridos fuera del conflicto

El Cairo, Egipto.

La ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) anunció este martes que ha suspendido su apoyo a la región de Guta Oriental, en las afueras de Damasco, donde dos centros sanitarios a los que ofrecía respaldo han sido atacados, en el marco de los choques entre facciones armadas.

En un comunicado, la organización explicó que ha adoptado esta medida 'hasta que haya señales claras de que las partes combatientes respetarán las instalaciones médicas'.

MSF explicó que el sábado una treintena de milicianos enmascarados irrumpieron en el hospital de Haza, en Guta Oriental, para buscar a determinadas personas heridas que estaban ingresadas en ese centro, y se llevaron una ambulancia.

A unos kilómetros al sur, otro centro sanitario, en Aftiris, ha sufrido durante dos días el impacto de disparos por los enfrentamientos en sus alrededores, y su personal médico ha quedado atrapado.

Además, ha resultado imposible rescatar a los heridos, incluso aquellos que estaban en las proximidades del lugar.

La ONG indicó que las informaciones que ha recibido de los médicos en el área denuncian 'graves incidentes' entre el 29 y el 30 de abril, en los que los grupos armados opositores no mostraron ninguna consideración por la situación de los pacientes, las instalaciones sanitarias y su personal.

'En nombre de los médicos que apoyamos, MSF condena en los términos más enérgicos la incursión armada a un centro de salud por parte de personas enmascaradas, la intimidación de los trabajadores sanitarios y la incautación de una ambulancia', dijo la responsable de Operaciones de MSF en Bélgica para Siria, Brice de le Vingne.

De le Vingne detalló que MSF se ha puesto en contacto con las facciones que operan en Guta Oriental para transmitir sus demandas y su decisión de suspender el apoyo en la región.

Entre sus exigencias figura que se deje a enfermos y heridos fuera del conflicto; permitir la evacuación de pacientes y médicos; facilitar el transporte sanitario; impedir que las instalaciones de salud sean empleadas con fines militares; y que ninguna arma o persona armada accedan a centros médicos.

El texto recuerda que los choques entre grupos armados opositores estallaron el viernes pasado en Guta Oriental, que lleva asediada por la fuerzas gubernamentales sirias desde 2013.

MSF instó a todas las facciones de Siria a que respeten las instalaciones médicas y los pacientes, lo que significa evitar los disparos o bombardeos, las incursiones armadas, la intimidación de médicos, el robo de ambulancias y suministros hospitalarios, y las detenciones o secuestros de heridos y enfermos bajo tratamiento.