El presidente estadounidense, Barack Obama, dijo hoy que la lucha contra los yihadistas suníes del Estado Islámico (Isis por sus siglas en inglés) no llevará a Estados Unidos a 'otra guerra sobre el terreno en Irak'.
Desde la base aérea de MacDill de Tampa (Florida), sede del Mando Central, responsable de las operaciones militares en Oriente Medio, Obama dijo que el combate contra el Isis en Irak y Siria tampoco será responsabilidad única de Estados Unidos y se respaldará en la coalición internacional de 40 países.
Obama aseguró frente a centenares de soldados que Isis no supone un peligro inminente, pero 'si los dejamos operar podrían suponer una gran amenaza para Estados Unidos', agregó.
'No los involucraré en una nueva guerra en tierra en Irak', insistió un día después de las declaraciones de Dempsey, el militar de mayor rango del país, quien sugirió que podrían ir a combatir consejeros militares.
'Usaremos nuestra fuerza aérea. Entrenaremos y equiparemos a nuestros aliados', declaró Obama después de haberse reunido con el general Lloyd Austin, jefe del Comando Central.
'Llevaremos adelante una amplia coalición entre países que tienen un interés en este combate, dado que no se trata sólo de Estados Unidos contra el Estado Islámico. Se trata el mundo que rechaza la brutalidad del Isis', las siglas de la organización yihadista Estado Islámico.
Según Obama, Estados Unidos no puede lanzarse solo en esta lucha. 'La experiencia nos enseñó que cuando hacemos las cosas solos y que los pueblos de estos países no están involucrados, vuelven a surgir los mismos problemas en cuanto nos vamos. Por lo tanto tendremos que actuar de otra manera'.