A sus 99 años, Doris Ayling, no podía creer la carta que le llegó de un hospital de Reino Unido en el que le informaban que estaba embarazada.
La madre de siete hijos, ya jubilados con siete nietos y trece bisnietos, no esperaba tal noticia ya que en ningún momento pese a los modernos tratamientos médicos que existen lo buscó por lo que la noticia no la creyó.
Lejos de preocuparse la simpática abuelita lo tomó con humor y hasta su hijo de 76 años, Bob, presumía que iba a tener un hermano.
En la carta se le pedía asistir al hospital cuanto antes para que pudiera hacerse las primeras ecografías.
El hospital le hizo llegar después la disculpa pues se habían equivocado y se trató de un error administrativo.
Ayling no concibe tal error porque nunca había visitado el centro asistencial.