San Pedro Sula, Honduras.
La fiesta de cumpleaños de Miguel Arnulfo Valle Valle, el 29 de octubre de 2011, en El Espíritu, Copán, no solo reunió a figuras conocidas de la política hondureña, sino al hombre más buscado del planeta: Joaquín el Chapo Guzmán.
La presencia del capo más famoso apantalló a los presentes, quienes a su llegada fueron advertidos de que en la lujosa residencia estaban prohibidas las fotografías.
Esa fue una de las celebraciones más recordadas en Copán por el calibre de los invitados al festín.
La imagen del hombre fornido y chaparro quedó grabada en la mente de muchos copanecos que aún recuerdan la famosa celebración en la escondida y pequeña aldea.
Fiestones
En fiestas privadas o ferias patronales, los Valle, Héctor Emilio Fernández Rosa, mejor conocido como Don H, y otras bandas que siguen traficando con droga patrocinaron la llegada de cantantes y grupos mexicanos al occidente de Honduras para que al son de la música grupera los copanecos disfrutaran de las parrandas en El Espíritu, Cabañas, Santa Rita y El Paraíso.
Grupos como Los Tigres del Norte, K-Paz de la Sierra, Tucanes de Tijuana, Chapo de Sinaloa y el ritmo del grupo colombiano La Sonora Dinamita amenizaron las fiestas.
Información en manos de la Inteligencia de las Fuerzas Armadas señala que las agrupaciones musicales recibieron entre 100,000 y 250,000 dólares por presentación en fiestas que duraron hasta dos días.
Los lugares elegidos para los festejos fueron hoteles de lujo, haciendas, salones municipales, estadios, parques y casas de los narcos.
En las fiestas privadas abundaron el whisky más fino y las decoraciones exóticas.
Todo el pueblo se enteraba de los jolgorios, incluso las autoridades, quienes muchas veces se hicieron de “la vista gorda”.
En cada evento, los hombres fuertes de occidente contrataron decenas de meseros y decoradores. Cada fiesta era una competencia en suntuosidad.
Muchos de los invitados fueron extranjeros, quienes se trasladaron en vuelos privados y carros blindados.
En estas fiestas se tiraba la casa por la venta, se contrataban buffets con comida internacional y entre más raros fueran los nombres de los platos, mejor.
Los conciertos
K-Paz de la Sierra estuvo en la feria patronal en El Paraíso, Copán, el 28 de abril de 2013.
El estadio municipal fue el escenario donde los presentes corearon y aplaudieron las canciones del famoso grupo mexicano.
Pero la polémica surgió en la segunda presentación del grupo porque no contaba con permiso de la Secretaría de Gobernación.
Ni las autoridades migratorias tenían conocimiento del ingreso de los músicos porque fueron recibidos en vehículos particulares sin controles en las fronteras.
El exdirector de Migración Venancio Cervantes explicó que K-Paz de la Sierra ingresó por la aduana El Florido.
A la lista de artistas mexicanos que amenizaron fiestones en Copán hay que sumar al Chapo de Sinaloa, cuyo concierto se realizó en La Entrada, Copán.
Los Tucanes de Tijuana tocaron en una fiesta privada en Copán Ruinas y luego grabaron un video musical en el parque arqueológico.
Los registros migratorios también señalan las presentaciones de Los Tigres del Norte en Cabañas, Copán, en junio de 2012, lugar que también recibió a la Sonora Dinamita de Colombia.
Las prepago
Un informe de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN) estableció que desde un salón de belleza en Copán, los Valle solicitaban a las mujeres para que los acompañaran en fiestas y encuentros privados.
Las muchachas contratadas, en su mayoría, eran copanecas y muy jóvenes. Otras llegaban procedentes de El Salvador.
Muerte en narcofiestas
No todo fue alegría. La violencia marcó una de las fiestas de los Valle en Copán Ruinas en 2012. El cumpleaños de Arnulfo, celebrado en fecha posterior al que asistió el “Chapo” Guzmán, se opacó en el salón del hotel donde se desarrollaba el festín por una discusión entre uno de los Valle y un capo guatemalteco.
Al calor de las copas, los hombres perdieron el control y se dio el enfrentamiento.
La reyerta generó oficialmente dos muertos, pero uno de los invitados aseguró que las víctimas fueron más.
De este hecho, la Policía nunca dio un informe. Nunca se supo con certeza qué fue lo que realmente ocurrió.
Por arte de magia, en minutos cada grupo levantó sus muertos, la escena fue modificada y los invitados huyeron temiendo lo peor.
Los Valle escoltados por sus guardaespaldas salieron del lugar y se fueron con su allegado herido al hospital.
Un helicóptero en la mañana lo trasladó desde una clínica en Santa Rosa de Copán a San Pedro Sula, donde se recuperó un mes después.
La fiesta de cumpleaños de Miguel Arnulfo Valle Valle, el 29 de octubre de 2011, en El Espíritu, Copán, no solo reunió a figuras conocidas de la política hondureña, sino al hombre más buscado del planeta: Joaquín el Chapo Guzmán.
La presencia del capo más famoso apantalló a los presentes, quienes a su llegada fueron advertidos de que en la lujosa residencia estaban prohibidas las fotografías.
Esa fue una de las celebraciones más recordadas en Copán por el calibre de los invitados al festín.
La imagen del hombre fornido y chaparro quedó grabada en la mente de muchos copanecos que aún recuerdan la famosa celebración en la escondida y pequeña aldea.
Fiestones
En fiestas privadas o ferias patronales, los Valle, Héctor Emilio Fernández Rosa, mejor conocido como Don H, y otras bandas que siguen traficando con droga patrocinaron la llegada de cantantes y grupos mexicanos al occidente de Honduras para que al son de la música grupera los copanecos disfrutaran de las parrandas en El Espíritu, Cabañas, Santa Rita y El Paraíso.
Grupos como Los Tigres del Norte, K-Paz de la Sierra, Tucanes de Tijuana, Chapo de Sinaloa y el ritmo del grupo colombiano La Sonora Dinamita amenizaron las fiestas.
Información en manos de la Inteligencia de las Fuerzas Armadas señala que las agrupaciones musicales recibieron entre 100,000 y 250,000 dólares por presentación en fiestas que duraron hasta dos días.
Los lugares elegidos para los festejos fueron hoteles de lujo, haciendas, salones municipales, estadios, parques y casas de los narcos.
En las fiestas privadas abundaron el whisky más fino y las decoraciones exóticas.
La Sonora Dinamita fue otra agrupación que los alegró.
|
En cada evento, los hombres fuertes de occidente contrataron decenas de meseros y decoradores. Cada fiesta era una competencia en suntuosidad.
Muchos de los invitados fueron extranjeros, quienes se trasladaron en vuelos privados y carros blindados.
En estas fiestas se tiraba la casa por la venta, se contrataban buffets con comida internacional y entre más raros fueran los nombres de los platos, mejor.
Los conciertos
K-Paz de la Sierra estuvo en la feria patronal en El Paraíso, Copán, el 28 de abril de 2013.
El estadio municipal fue el escenario donde los presentes corearon y aplaudieron las canciones del famoso grupo mexicano.
Pero la polémica surgió en la segunda presentación del grupo porque no contaba con permiso de la Secretaría de Gobernación.
Ni las autoridades migratorias tenían conocimiento del ingreso de los músicos porque fueron recibidos en vehículos particulares sin controles en las fronteras.
El exdirector de Migración Venancio Cervantes explicó que K-Paz de la Sierra ingresó por la aduana El Florido.
A la lista de artistas mexicanos que amenizaron fiestones en Copán hay que sumar al Chapo de Sinaloa, cuyo concierto se realizó en La Entrada, Copán.
Los Tucanes de Tijuana tocaron en una fiesta privada en Copán Ruinas y luego grabaron un video musical en el parque arqueológico.
Los registros migratorios también señalan las presentaciones de Los Tigres del Norte en Cabañas, Copán, en junio de 2012, lugar que también recibió a la Sonora Dinamita de Colombia.
Muchas de las fiestas se hicieron en las piscinas y rodeos de los Valle.
|
Un informe de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN) estableció que desde un salón de belleza en Copán, los Valle solicitaban a las mujeres para que los acompañaran en fiestas y encuentros privados.
Las muchachas contratadas, en su mayoría, eran copanecas y muy jóvenes. Otras llegaban procedentes de El Salvador.
Muerte en narcofiestas
No todo fue alegría. La violencia marcó una de las fiestas de los Valle en Copán Ruinas en 2012. El cumpleaños de Arnulfo, celebrado en fecha posterior al que asistió el “Chapo” Guzmán, se opacó en el salón del hotel donde se desarrollaba el festín por una discusión entre uno de los Valle y un capo guatemalteco.
Al calor de las copas, los hombres perdieron el control y se dio el enfrentamiento.
La reyerta generó oficialmente dos muertos, pero uno de los invitados aseguró que las víctimas fueron más.
De este hecho, la Policía nunca dio un informe. Nunca se supo con certeza qué fue lo que realmente ocurrió.
Por arte de magia, en minutos cada grupo levantó sus muertos, la escena fue modificada y los invitados huyeron temiendo lo peor.
Los Valle escoltados por sus guardaespaldas salieron del lugar y se fueron con su allegado herido al hospital.
Un helicóptero en la mañana lo trasladó desde una clínica en Santa Rosa de Copán a San Pedro Sula, donde se recuperó un mes después.