San Pedro Sula, Honduras.
El hospital Mario Catarino Rivas ahora cuenta con dos modernas salas para hemodiálisis gracias a que Diálisis de Honduras donó el equipo y acondicionó el área.
La inversión asciende, aproximadamente, a un millón de lempiras.
Una de las salas está a disposición de los adultos y la otra es un espacio para niños que sufren insuficiencia renal.
En el Rivas se atiende a más de 900 personas con la enfermedad.
Antes era complicado asistirlos porque solo había capacidad para 10 personas por día; no obstante, podrán dializar a más de 25 pacientes al día.
Donald Swendener, presidente de Diálisis de Honduras, advirtió que es alarmante el incremento de casos de la enfermedad.
“La insuficiencia renal es una epidemia en Honduras. Solo el año pasado atendimos a 700 pacientes nuevos”.
Swendener añadió que la donación hecha al Mario Rivas asciende al millón de lempiras. Además, donarán 50 diálisis al mes. Merlin Fernández, presidente de la comisión interventora del hospital, admitió que las salas aliviarán un poco la carga.
“También nos donaron equipos portátiles que nos van a servir en las áreas críticas del hospital”, indicó.
El hospital Mario Catarino Rivas ahora cuenta con dos modernas salas para hemodiálisis gracias a que Diálisis de Honduras donó el equipo y acondicionó el área.
La inversión asciende, aproximadamente, a un millón de lempiras.
Una de las salas está a disposición de los adultos y la otra es un espacio para niños que sufren insuficiencia renal.
En el Rivas se atiende a más de 900 personas con la enfermedad.
Antes era complicado asistirlos porque solo había capacidad para 10 personas por día; no obstante, podrán dializar a más de 25 pacientes al día.
Donald Swendener, presidente de Diálisis de Honduras, advirtió que es alarmante el incremento de casos de la enfermedad.
“La insuficiencia renal es una epidemia en Honduras. Solo el año pasado atendimos a 700 pacientes nuevos”.
Swendener añadió que la donación hecha al Mario Rivas asciende al millón de lempiras. Además, donarán 50 diálisis al mes. Merlin Fernández, presidente de la comisión interventora del hospital, admitió que las salas aliviarán un poco la carga.
“También nos donaron equipos portátiles que nos van a servir en las áreas críticas del hospital”, indicó.
