22/12/2024
07:37 AM

Brutalidad policial desata la indignación al sur de México

Ciudad de México. Unas 3,000 personas se manifestaron ayer por las calles de Chilpancingo, capital de Guerrero. Este estado del sur de México vive, desde el viernes, una particular ola de violencia protagonizada por estudiantes, narcotraficantes, políticos y policías. Una tormenta perfecta.

El suceso más grave se produjo en la ciudad de Iguala. Hasta allí se desplazó un grupo de “normalistas”, estudiantes de magisterio al parecer, para recaudar fondos para sus actividades reivindicativas. Este colectivo tiene un largo historial de enfrentamientos con la Policía. Por motivos que todavía no han sido aclarados, los estudiantes se subieron en varios autobuses municipales que pretendían llevar hasta la capital con el permiso de los conductores, según aseguran. Por motivos que también se están investigando, la Policía abrió fuego contra varios de estos autobuses dejando un saldo de 3 muertos, 25 heridos y 57 desaparecidos.

22 agentes han sido detenidos en calidad de “posibles responsables”, pero las acusaciones no terminan allí. Los “normalistas acusan al alcalde de Iguala, José Luis Abarca, de ser cómplices de la delincuencia organizada junto con varios de los policías municipales que atentaron ese día contra los estudiantes.La Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (Ceteg) amenazó con paralizar todas las escuelas del estado si no se castiga a los responsables. De la suerte de los desaparecidos depende, por tanto, la estabilidad en este estado, uno de los más pobres y violentos del país y que desde hace tiempo se ha convertido en una de las rutas principales del narcotráfico.

Autoridades en vilo

El procurador del estado de Guerrero, Iñaky Blanco Cabrera, explicó en rueda de prensa los resultados de las pesquisas y aclaró que para el traslado de los detenidos fue necesario el apoyo de las fuerzas armadas, debido a que un numeroso grupo de familiares de los arrestados intentaba frenar el operativo y amenazaba con rescatarlos.

Blanco explicó que en las próximas horas se definirá la situación legal de los uniformados detenidos, que pueden ser sometidos a un proceso penal por el “uso excesivo de la fuerza”, ya que la respuesta policial “no fue proporcional sino desmedida, y no hay ninguna justificación para que hayan hecho uso de las armas de fuego”.

Balacera en Acapulco

Hombres armados asesinaron, ayer, a cinco personas en un barrio de Acapulco, también en Guerrero. Los individuos tenían entre 25 y 33 años y convivían afuera de una casa.

Unos pistoleros abrieron fuego en su contra por motivos que todavía se investigan.

En esta misma localidad, el domingo, fue tiroteado el líder local del opositor Partido Acción Nacional (PAN). El asesinato se produjo en uno de los restaurantes más famosos de la localidad.