Olanchito, Yoro
El periodista hondureño Nery Francisco Soto Torres (32) fue ultimado a balazos la noche de este jueves en la ciudad de Olanchito, Yoro.
El comunicador, quien se disponía a ingresar a su casa cuando regresaba de trabajar a eso de las 10:00 pm, fue atacado a balazos por varios sujetos que al paracer lo estaban esperando.
Los vecinos que escucharon la detonaciones de arma de fuego salieron a auxiliarlo, pero el periodista de Canal 23 de Olanchito ya había muerto.
Agentes de la Policía que llegaron a la escena del crimen dijeron que se descarta que el móvil sea para robarle porque tenía todas sus pertenencias.
Se conoció que en la colonia donde vivía el comunicador no había servicio de energía eléctrica por lo que no se percató que lo estaban esperando para matarlo.
Los restos mortales fueron velados en la funeraria municipal de la ciudad cívica.
Nery deja dos hijos, uno de 3 años y otro de varios meses.
La policía descartó el robo porque los asesinos no se llevaron las pertenencias de Soto.
Desde el 2003 el estatal Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh) contabilizó 46 asesinatos de comunicadores, la mayoría periodistas, pero incluye también locutores humoristas y otros trabajadores de medios de comunicación.
Vea: Con Herlyn Espinal suman 37 los periodistas asesinados
El último periodista hondureño asesinado había sido Herlyn Espinal, de 33 años, cuyo cadáver apareció en un potrero el 21 de julio, tres días después de haber sido secuestrado también en el norte del país.
Más del 90% de los asesinatos de comunicadores siguen impunes.
El Congreso hondureño analiza un proyecto de ley para proteger a periodistas, abogados y activistas de Derechos Humanos por ser particularmente vulnerables.
Pero en Honduras, con la tasa de homicidios más alta del mundo, los asesinatos ocurren en todos los sectores de la población.
De acuerdo al Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional, el país centroamericano registró en el 2013 una tasa de 79 homicidios por cada 100.000 habitantes.
