La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) expresó hoy su satisfacción por la nueva ley de protección para periodistas de Honduras, aunque, en su opinión, presenta varias debilidades que 'pudieran afectar su puesta en práctica y eficacia'.
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Claudio Paolillo, señaló que, si bien la nueva legislación 'contiene puntos que representan un sensible avance en la protección de los derechos y libertades fundamentales' de los periodista, muestra ciertos fallos en su visión integral.
Paolillo, director del semanario Búsqueda de Uruguay, advirtió de que la ley hondureña 'deja fuera aspectos que podrían convertirla en una norma difícil de operar e ineficaz'.
'Tampoco existe claridad sobre el presupuesto suficiente e idóneo, ni se da cuenta sobre la suficiente capacidad de operación y de supervisión', agregó.
La creación de un mecanismo institucional para protección de los periodistas y otros grupos afectados por la violencia fue incluido en el plan de acción emanado de la Conferencia de Seguridad, Protección y Solidaridad para la Libertad de Expresión, celebrada en Tegucigalpa en 2012 por la SIP y la Asociación de Medios de Comunicación de Honduras (AMC).
En esa ocasión también se instó 'a los poderes públicos a realizar un análisis técnico-jurídico y consensuar una propuesta única de ley que dé soporte y facilite la implementación efectiva del mecanismo de protección para periodistas y grupos vulnerables'.
'Nuestra mayor preocupación es que pueda terminar como la ley mexicana, que, tras dos años en vigencia y sin presupuesto adecuado, no ha logrado constituirse como un verdadero organismo que cumpla con ofrecer seguridad a reporteros y medios amenazados', apostilló Paolillo.