Puerto Cortés, Honduras.
Lo que debía ser un viaje de una semana se convirtió en una pesadilla de 14 días para los 33 cubanos que llegaron ayer a la barra de Chamelecón, en Bajamar.
Fueron 34 los cubanos que salieron de su pueblo, Manzanillo, en Cuba, con el fin de llegar a tierra hondureña. Pese a los sufrimientos y la pérdida de uno de sus amigos lograron cumplir su objetivo.
“Dejamos nuestro país por los problemas económicos, ya que en Cuba el trabajo no se paga bien y todo es caro. Pasamos una pesadilla, pero ya estamos en nuestro destino, que era Honduras”, expresó Alexis Minie.
Los cubanos relataron que el viaje tenía que durar solo siete días, pero el GPS y el motor de la balsa se dañaron. Quedaron a la deriva y llegaron a Honduras por pura intuición.
Pescadores de la comunidad garífuna de Bajamar identificaron una embarcación extraña que se acercaba a sus playas. De inmediato corrieron la voz para ayudar a los extranjeros.
José Serrano, presidente del patronato de Bajamar, dijo que uno de los pobladores de la zona salió a las 4:00 am a pescar cuando vio que algunas personas nadaban desesperadamente, pero ya no resistían. Se acercó a ellas y las ayudó a llegar a la orilla. “Es la primera vez que a nuestras tierras llegan balseros cubanos, por lo que no dudamos en ayudarlos y como venían muy deshidratados les dimos agua de coco y alimentación”, relató Serrano.
Marlon Enrique Lagos, jefe de la Dirección Nacional de Servicios Especiales de Investigación (DNSEI) en Puerto Cortés, dijo: “Como autoridades policiales nos corresponde atender a todo extranjero que llega al país para investigar su estatus y verificar que no tenga problemas judiciales”.
El jefe policial agregó que los cubanos permanecieron temporalmente en la DNSEI, pero no como detenidos porque el caso ya está en manos de las autoridades de Migración y Extranjería. Francisco Munguía, jefe de Migración en Puerto Cortés, dijo que a los cubanos se les concede un tiempo para que puedan solicitar asilo y legalizarse en el país.
Mauricio Paredes, jefe regional de la Cruz Roja, manifestó: “Evaluamos a cada uno de los cubanos porque pasaron varios días sin alimento y todos estaban deshidratados”.
El personal médico dijo que los extranjeros ya están estables y su condición emocional ha influido en su recuperación porque sienten alivio al haber logrado salir de su país.
Lo que debía ser un viaje de una semana se convirtió en una pesadilla de 14 días para los 33 cubanos que llegaron ayer a la barra de Chamelecón, en Bajamar.
Fueron 34 los cubanos que salieron de su pueblo, Manzanillo, en Cuba, con el fin de llegar a tierra hondureña. Pese a los sufrimientos y la pérdida de uno de sus amigos lograron cumplir su objetivo.
“Dejamos nuestro país por los problemas económicos, ya que en Cuba el trabajo no se paga bien y todo es caro. Pasamos una pesadilla, pero ya estamos en nuestro destino, que era Honduras”, expresó Alexis Minie.
Los cubanos relataron que el viaje tenía que durar solo siete días, pero el GPS y el motor de la balsa se dañaron. Quedaron a la deriva y llegaron a Honduras por pura intuición.
Pescadores de la comunidad garífuna de Bajamar identificaron una embarcación extraña que se acercaba a sus playas. De inmediato corrieron la voz para ayudar a los extranjeros.
José Serrano, presidente del patronato de Bajamar, dijo que uno de los pobladores de la zona salió a las 4:00 am a pescar cuando vio que algunas personas nadaban desesperadamente, pero ya no resistían. Se acercó a ellas y las ayudó a llegar a la orilla. “Es la primera vez que a nuestras tierras llegan balseros cubanos, por lo que no dudamos en ayudarlos y como venían muy deshidratados les dimos agua de coco y alimentación”, relató Serrano.
Marlon Enrique Lagos, jefe de la Dirección Nacional de Servicios Especiales de Investigación (DNSEI) en Puerto Cortés, dijo: “Como autoridades policiales nos corresponde atender a todo extranjero que llega al país para investigar su estatus y verificar que no tenga problemas judiciales”.
El jefe policial agregó que los cubanos permanecieron temporalmente en la DNSEI, pero no como detenidos porque el caso ya está en manos de las autoridades de Migración y Extranjería. Francisco Munguía, jefe de Migración en Puerto Cortés, dijo que a los cubanos se les concede un tiempo para que puedan solicitar asilo y legalizarse en el país.
Mauricio Paredes, jefe regional de la Cruz Roja, manifestó: “Evaluamos a cada uno de los cubanos porque pasaron varios días sin alimento y todos estaban deshidratados”.
El personal médico dijo que los extranjeros ya están estables y su condición emocional ha influido en su recuperación porque sienten alivio al haber logrado salir de su país.
Según autoridades locales, Honduras se ha convertido en los últimos años en un punto de tránsito de inmigrantes, especialmente cubanos, que abandonan su país para irse a Estados Unidos, y sólo este año ya suman más de 700 los caribeños detenidos.
