Activistas pro reforma migratoria, demócratas y analistas advirtieron hoy de que la histórica derrota del líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, Eric Cantor, en las primarias de Virginia podría alejar la posibilidad de aprobar la controvertida ley antes de final de año.
Cantor fue derrotado este martes con el 44% de los votos por un candidato desconocido del Tea Party, Dave Brat, que usó como principal argumento de su campaña la supuesta tibieza del legislador ante la reforma migratoria planteada por el Gobierno de Barack Obama.
Por tanto, demócratas y grupos pro reforma temen que de este fracaso los republicanos extraigan el mensaje de que no deben correr el riesgo político de abordar la reforma migratoria al menos hasta que pasen las elecciones de noviembre.
'Con el Tea Party provocando miedo a cada candidato republicano, se agudizará la disfunción que ha paralizado al Congreso y les impedirá emprender acciones para ayudar a la clase media', esgrimió el presidente del Comité de Campaña Demócrata del Congreso, Steve Israel.
'La derrota de Cantor demuestra que no hay ninguna posibilidad de aprobar la reforma este verano porque él, que se presentó defendiendo haber impedido una 'amnistía para inmigrantes ilegales', fue derrotado por ser considerado 'demasiado blando' en inmigración', esgrimió en un comunicado el director ejecutivo del grupo de defensa de los derechos de los inmigrantes Dream Action Coalition, César Vargas.
LEA: El Papa y Obama abordan asuntos sociales como la reforma migratoria
'Obama ofreció a la Cámara otra oportunidad y ellos han dejado claro que no están dispuestos a utilizarla. Ahora -el presidente- debe aliviar las deportaciones y aplicar otras medidas en su mano', añadió.
Obama pidió en mayo al secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, que aplazara la publicación del informe de revisión de las políticas de deportaciones para no torpedear la reforma migratoria, estancada en la Cámara de Representantes.
La oposición republicana le había advertido de que cualquier acción por decreto en este sentido anularía toda posibilidad de que la reforma migratoria vea la luz.
Dave Brat, un profesor de economía desconocido hasta ahora, usó el tema de la inmigración como arma arrojadiza contra Cantor, que se defendió de las críticas durante la campaña con vehemencia y llegó incluso a repartir folletos con titulares de periódicos que le catalogaban como un hombre duro con los indocumentados.
Los analistas coinciden en que su supuesta moderación en el tema migratorio, sumada a un hartazgo de las bases con la actuación de sus representantes en Washington, han sido las principales causas de una derrota que nadie esperaba y que da un giro a las primarias al Congreso.
El influyente diario Politico llegó incluso a afirmar en uno de sus artículos que la reforma migratoria está 'muerta' porque los candidatos republicanos que vean peligrar su escaño en noviembre se sentirán 'muy presionados' por lo que le ha ocurrido a Cantor.
El senador demócrata por Nueva York, Chuck Schumer, esgrimió no obstante que la derrota del legislador 'no cambia el hecho de que los republicanos se convertirán en un partido minoritario si no trabajan para arreglar un sistema de inmigración que no funciona'.
Otros grupos pro reforma, como Casa de Virginia, argumentan que Cantor perdió esta noche por su 'inacción' en materia migratoria.
'Perdió porque quiso parecer alguien del Tea Party y no escuchó a su distrito. Pero los votantes y los líderes empresariales y de fe están más que de acuerdo en que un verdadero líder pone fin al sufrimiento de nuestras familias', dijo en un comunicado uno de los responsables de la organización, Lindolfo Carballo.
La derrota del republicano, la primera desde que se creó el cargo de líder de la mayoría de la Cámara de Representantes en 1899, ha sido recibida como un 'terremoto' político en Washington, donde se debaten sus consecuencias en la estructura del partido y su repercusión en el devenir de la reforma migratoria, atascada en la Cámara de Representantes. EFE
XXXXXXXXXXXX
El 62 % de los votantes en Estados Unidos están a favor de conceder la ciudadanía a los indocumentados como parte de la reforma migratoria que se debate desde hace más de un año en el Congreso, según reveló una encuesta publicada hoy.
La encuesta, realizada por el Public Religion Research Institute junto a The Brookings Institution a 1.538 votantes entre el 7 y el 27 de abril pasado, muestra la opinión de los estadounidenses un año después de que se aprobara en el Senado una propuesta bipartidista que incluye un camino para la ciudadanía para los casi 12 millones de inmigrantes indocumentados que se calcula que hay en el país.
El 70 % de los votantes registrados como demócratas dijeron estar a favor de que se conceda la ciudadanía a los indocumentados tras cumplir una serie de requisitos, mientras que entre los independientes y republicanos este apoyo baja hasta el 61 y 51 %, respectivamente.
A falta de cinco meses para las elecciones legislativas de noviembre próximo, el estudio muestra que cerca del 53 % de los encuestados no votaría a un candidato que se opusiera a esta reforma.
Solo un cuarto de la población (26 %) considera que esta reforma debería tener máxima prioridad en el Gobierno del presidente, Barack Obama, frente al 47 % que opina que, a pesar de su importancia, este tema no debe ser el más urgente en la agenda de la Casa Blanca.
Según la encuesta, que tiene un margen de error del 3,3 %, apenas el 6 % de los estadounidenses considera eficaz el actual sistema migratorio.
Frente a esta cifra, cuatro de cada diez encuestados opinan que la política migratoria está obsoleta, pero que aún funciona en algunos ámbitos, mientras que el 23 % la ve totalmente ineficaz.
El 68 % de los votantes registrados siguen estando a favor de los elementos básicos del Dream Act, un proyecto de ley que ofrecía la residencia permanente a los jóvenes indocumentados que llegaron al país siendo niños, pero que fracasó en el Congreso en diciembre de 2010.
Esta encuesta muestra un mayor apoyo a establecer una vía para la ciudadanía de los indocumentados que la que reflejaba una encuesta conjunta del diario 'The Washington Post' y la cadena televisiva ABC publicada en julio del año pasado, que afirmaba que el 55 % de los consultados apoyaba esta opción, contra el 41 % que se oponía.