Georgetown, Guyana.
El comisionado de la Policía, Seelall Persaud, informó que las autoridades del vecino Surinam fueron puestas en alerta. Entre los fugitivos se cuenta un condenado a muerte en febrero por el asesinato de 12 personas en 2008.
El Jefe de la Prisión, Gladwin Samuels, dijo que por el momento no hay informes de presos heridos o muertos.
Muchos reclusos fueron sacados de la cárcel y llevados a un club de policías ubicado frente a la prisión.
Una vez allí varios de ellos rompieron botellas de ron y vodka, empaparon ropas con esas bebidas y con encendedores de cigarrillos las convirtieron en teas con las cuales destrozaron las instalaciones del local.
El ministro Ramjarran dijo que más de un millar de presos fueron reubicados en el patio de otro centro de reclusión.
El ministro añadió que unos 300 de ellos serán enviados a otras cárceles cuyas autoridades deberán encontrar la manera de hacerles un lugar. AFP.
Un oficial murió y siete resultaron heridos cuando reclusos desataron un incendio en una prisión de Guyana y cuatro lograron escapar, dijeron el domingo las autoridades.
Los presos incendiaron un complejo de máxima seguridad de de Georgetown para distraer a los guardias y darse a la fuga, dijo el ministro de Seguridad Pública, Khemraj Ramjattan. Añadió que los fugitivos son 'peligrosos criminales'.
Muchos de los reclusos lograron hacerse de armas para sostener un enfrentamiento con los guardias.
Mientras el fuego devoraba las instalaciones de ladrillo y madera, los presos consiguieron salir de sus celdas e hirieron a ocho guardias; uno de los cuales murió por disparos en el pecho.
Durante los disturbios soldados fuertemente armados tomaron posiciones en torno a esa sobrepoblada prisión de tiempos coloniales.
 Los pobladores observaban atónitos el incendio en el centro penal.
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El comisionado de la Policía, Seelall Persaud, informó que las autoridades del vecino Surinam fueron puestas en alerta. Entre los fugitivos se cuenta un condenado a muerte en febrero por el asesinato de 12 personas en 2008.
El Jefe de la Prisión, Gladwin Samuels, dijo que por el momento no hay informes de presos heridos o muertos.
Muchos reclusos fueron sacados de la cárcel y llevados a un club de policías ubicado frente a la prisión.
Una vez allí varios de ellos rompieron botellas de ron y vodka, empaparon ropas con esas bebidas y con encendedores de cigarrillos las convirtieron en teas con las cuales destrozaron las instalaciones del local.
El ministro Ramjarran dijo que más de un millar de presos fueron reubicados en el patio de otro centro de reclusión.
El ministro añadió que unos 300 de ellos serán enviados a otras cárceles cuyas autoridades deberán encontrar la manera de hacerles un lugar. AFP.
