San Pedro Sula, Honduras.
Honduras necesita incrementar su producción para reducir el déficit de la balanza de pagos que cerrará en cerca de 4.8% en 2017 con relación al PIB.
Manuel de Jesús Bautista, presidente del Banco Central de Honduras (BCH), recordó que el déficit en este indicador rondaba el 15% en años pasados y en 2016 cerró en 3.8% del producto interno bruto. Dicho comportamiento estuvo inducido por la reducción en las importaciones de bienes y mayor flujo de remesas familiares, contrarrestados en parte por la baja en las exportaciones de bienes.
El incremento previsto por el BCH para este año es producto del incremento de las materias primas en el mercado internacional y el petróleo.
“Dependemos mucho de la cuenta corriente. Por ejemplo, Guatemala está cerrando su cuenta con un superávit de 2% y eso da revaluación de la moneda”, explicó Bautista.
Según el Programa Monetario 2017-2018, el tipo de cambio nominal cerró el año pasado en 5.08%, cuando la meta proyectada era de 4.28%, que representó una devaluación de 1.12 lempiras por dólar.
Para este año el BCH mantiene la meta de 5%, que rondaría los 1.10 lempiras por dólar, pese al escenario externo.
Honduras necesita incrementar su producción para reducir el déficit de la balanza de pagos que cerrará en cerca de 4.8% en 2017 con relación al PIB.
Manuel de Jesús Bautista, presidente del Banco Central de Honduras (BCH), recordó que el déficit en este indicador rondaba el 15% en años pasados y en 2016 cerró en 3.8% del producto interno bruto. Dicho comportamiento estuvo inducido por la reducción en las importaciones de bienes y mayor flujo de remesas familiares, contrarrestados en parte por la baja en las exportaciones de bienes.
El incremento previsto por el BCH para este año es producto del incremento de las materias primas en el mercado internacional y el petróleo.
“Dependemos mucho de la cuenta corriente. Por ejemplo, Guatemala está cerrando su cuenta con un superávit de 2% y eso da revaluación de la moneda”, explicó Bautista.
Según el Programa Monetario 2017-2018, el tipo de cambio nominal cerró el año pasado en 5.08%, cuando la meta proyectada era de 4.28%, que representó una devaluación de 1.12 lempiras por dólar.
Para este año el BCH mantiene la meta de 5%, que rondaría los 1.10 lempiras por dólar, pese al escenario externo.
Criterios
Empresarios y economistas sostienen que en lo que va del año la devaluación es acelerada. En enero la divisa sufrió una depreciación de 10 centavos y en febrero una apreciación de 7 centavos.
Ayer el tipo de cambió cerró en L23.5419 por dólar, según la información del BCH.
“El 5% es el porcentaje que hemos tenido en años anteriores y al que estamos acostumbrados. No trae ninguna sorpresa porque ya está avisado y por el mismo hecho permite hacer las proyecciones de flujo de caja, precios y gastos a las empresas y personas naturales”, indicó Jorge Faraj, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC).
El empresario afirmó que es válida la preocupación general por la devaluación del lempira, pero “esperamos que sea de acuerdo con lo proyectado”. Para Nelson García Lobo, presidente de la junta directiva del Fosdeh, la devaluación será entre 5% y 7%, influenciada por el comportamiento de las remesas familiares.
Estas divisas han mostrado un significativo incremento interanual de $40.2 millones, sumando $670.3 millones hasta el 3 de marzo pasado.
“Las remesas permiten mantener entre 5 y 7% la devaluación frente al dólar, pero podría intensificarse en 2018 y 2020. Si tenemos menos remesas, podría ser un riesgo para un deslizamiento acelerado”, aseguró García Lobo.
