Washington, Estados Unidos
El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, dijo este jueves en el Capitolio, Washington, que la crisis humanitaria de los niños migrantes centroamericanos también es provocada por la ambigüedad y falta de claridad de las políticas migratorias de Estados Unidos.
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“Durante el periodo de un año, este problema se ha desbordado como nunca habíamos visto… Esto tiene sus orígenes, en el caso de Honduras, en la violencia generada por el narcotráfico y, obviamente, en la falta de oportunidades”, dijo Hernández, durante una reunión con la diputada Nancy Pelosi, líder de la minoría Demócrata del Congreso de Estados Unidos.
Agregó: “Pero también es provocada por la falta de claridad y ambigüedad en la política o las posiciones de las reformas migratorias que ha venido teniendo lugar en Estados Unidos y que los coyotes perversamente usan para engañar a las familias centroamericanas”.
Cuando hablo de coyotes hablo de un enorme monstruo compuesto por coyotes, traficantes de personas y de drogas, que tienen un pie en Centroamérica y México y el otro en Estados Unidos, bajo la jurisdicción de Estado Unidos, explicó el mandatario.
“Por lo tanto –continuó diciendo-, es un problema que debemos compartir en la solución y por eso estamos aquí, para trabajar juntos de la mano en la solución de ese problema, de esta crisis de la humanidad que afecta a miles de niños”.
Luego de expresar que los “niños son los más vulnerables en esta crisis humanitaria y migratoria”, el Presidente agradeció la oportunidad de poder exponer en el Capitolio su posición y los esfuerzos que Honduras realiza para enfrentar esta crisis humanitaria
Agenda de este jueves
Hoy el gobernante hondureño la agenda de trabajo inició desde las 8:00 am (Hora de Washington), cuando comenzó una reunión con los senadores demócratas Tim Kaine, miembro del Comité de Relaciones Exteriores, y Bill Nelson, miembro del Comité de Presupuesto.
Hernández es acompañado por el designado presidencial Ricardo Álvarez, el coordinador del gabinete de gobierno Ramón Hernández Alcerro, el ministro de Seguridad Arturo Corrales y el secretario de Defensa Samuel Reyes.
A las 9:15 am se reunió con durante media hora con el congresista Henry Cuellar, miembro del Comité de Apropiaciones.
Posteriormente se trasladó del hotel donde se efectuaron estas primeras reuniones al Capitolio, junto a Álvarez y Hernández Alcerro. Allí sostendrá un encuentro con los presidentes Sánchez Cerén y Peréz, así como con diputados demócratas del Congreso.
Para las 10:50 am se tiene prevista una cita en el Center for Strategic International Studies (CSIS), donde se realizá entre las 11:00 am y 12:00 M harán una presentación para discutir el tema de seguridad en el contexto de la crisis migratoria. Y a las 12:30 pm sostendrá una reunión privada de la que no se precisaron detalles.
Por la tarde iniciará una reunión de una hora, en la que también estará Sánchez Cerén y Pérez, con miembros de la Cámara de Representantes organizada por el Presidente del Congreso John Boehner.
Obama los recibe
El presidente Barack Obama recibirá este viernes a sus pares de Honduras, El Salvador y Guatemala para abordar la entrada ilegal a Estados Unidos de más de decenas de miles de menores solos, que ha generado una crisis humanitaria.
Los presidentes del llamado Triángulo Norte, Otto Pérez (Guatemala), Salvador Sánchez Cerén (El Salvador) y Juan Orlando Hernández (Honduras) se verán con Obama en la Casa Blanca por primera vez desde que se desató la crisis hace dos meses.
El consejero del departamento de Estado de Estados Unidos, Thomas Shannon, adelantó el miércoles en San Salvador que de la reunión saldrá un plan conjunto para enfrentar la migración de menores.
La violencia criminal de las pandillas, la falta de oportunidades económicas y la separación de las familias empujan a los padres a enviar a sus hijos, en ocasiones niños menores de seis años, con traficantes conocidos como coyotes a través de peligrosas rutas hacia la frontera estadounidense.
Los mandatarios entonces diseñarán estrategias conjuntas de desarrollo económico y seguridad ciudadana en América Central, dijo Shannon, destacando que 'el desafío número uno es convencer a estos jóvenes de que no salgan de sus países'.
Pero también buscarán maneras de mejorar la cooperación en materia migratoria entre los distintos gobiernos.
Según la Casa Blanca, Obama y sus pares centroamericanos promoverán una 'migración segura, legal y ordenada' entre los países con un espíritu de 'responsabilidad compartida'.
El ingreso ilegal a Estados Unidos de 57.000 niños sin la compañía de sus representantes desde octubre pasado ha provocado una crisis humanitaria que preocupa a las autoridades de los países involucrados.
Serán deportados
En Estados Unidos las autoridades siguen intentando acoplarse a la crisis, que ha desbordado la capacidad para albergar a los menores y procesar sus casos.
El gobernador de Texas reforzó su frontera con México con 1.000 soldados, apenas dos días antes de que Estados Unidos anunciara la detención de 192 presuntos traficantes de personas en esa sensible zona durante el último mes.
A la par, Obama solicitó al Congreso recursos especiales por 3.700 millones de dólares para aumentar el número de agentes fronterizos y de jueces migratorios.
Pero su aprobación no está asegurada en un Congreso muy dividido entre demócratas y republicanos y celoso de los gastos, cuando quedan pocos días para el receso del verano boreal.
Así, los coyotes se ofrecen a llevar a los menores con la promesa de que no serán deportados. Comúnmente, los menores detenidos son alojados en albergues o enviados con un familiar mientras la justicia determina su estatus, lo que puede tardar meses o años.
