23/11/2024
12:01 AM

Honduras espera frenar narcotráfico con escudo naval y aéreo

Estados Unidos a través del Comando Sur ha decidido acompañar al Gobierno de Juan Olrando Hernández en la lucha contra el crimen organizado.

Tegucigalpa, Honduras

El Gobierno de Honduras espera frenar el narcotráfico sudamericano con un bloqueo naval conjunto con Estados Unidos y otro aéreo, con sus propios recursos, que permitirá a este país centroamericano hasta derribar avionetas sospechosas de transportar drogas en el Caribe.

El bloqueo naval ha sido anunciado por el ministro de Defensa, Samuel Reyes, quien dijo esta semana que Estados Unidos ha reactivado su servicio de guardacostas en aguas internacionales cercanas a Honduras para apoyar al Gobierno que preside Juan Orlando Hernández en la lucha que ha emprendido contra el narcotráfico.

'Estados Unidos a través del Comando Sur ha decidido acompañarnos en fortalecer nuestro escudo naval', indicó Reyes.

Hernández, por su parte, reiteró el viernes que el problema del narcotráfico en su país 'es de vida o muerte', por las vidas que se pierden y que el escudo naval en el Caribe 'va a ayudar mucho'.

'El apoyo debe ser integral, porque este no es un tema sólo de Honduras, nosotros sufrimos por los adictos (a la droga) de allá de Estados Unidos', expresó Hernández, quien al asumir el poder el 27 de enero pasado invitó a Barack Obama a que brinde más ayuda a su país y el resto de Centroamérica para combatir el narcotráfico.

También dijo que para Estados Unidos el problema de la droga es solamente un tema de salud.

Dos semanas después de haber asumido Hernández, llegó a Tegucigalpa el subsecretario de Estado de Estados Unidos para Antinarcóticos y Seguridad, William Brownfield, acompañado del jefe del Comando Sur, John Kelly, quien incluso viajó al Caribe hondureño para observar la asistencia de Washington.

Hernández ha iniciado con mano dura la lucha contra el narcotráfico, recordó el ministro de Defensa al destacar algunos golpes como la incautación de más de 2,000 kilos de cocaína en un contenedor procedente de Colombia que atracó en el Caribe hondureño.

En lo que va de año las autoridades también han desmantelado al menos dos laboratorios para la producción de cocaína y otras drogas, y se han incautado de decenas de barriles con químicos para ese mismo objetivo, procedentes de Colombia, y de Alemania el cargamento más reciente, el pasado miércoles.

Según Reyes, desde que Honduras anunció que, según una ley de exclusión aérea recién aprobada por el Parlamento, derribará avionetas sospechosas de llevar droga que no acaten la instrucción para aterrizar, los narcotraficantes han cambiado sus rutas.

Pero al parecer se ha incrementado la llegada de droga en contenedores al caribeño Puerto Cortés, el más importante del país.

El viernes, en una operación en aguas internacionales con fuerzas de Colombia, Panamá y Estados Unidos la Policía colombiana se incautó de 1.5 toneladas de cocaína supuestamente pertenecientes a la banda criminal Los Urabeños transportadas en una lancha por el Caribe con destino a Honduras, informaron fuentes oficiales en Bogotá.

Para el presidente hondureño, a los delincuentes, criminales y narcotraficantes 'se les acabó la fiesta' porque su Gobierno los combatirá sin tregua.

Al concluir Brownfield su visita a Honduras, en febrero, dijo que traía buenas noticias en muchos sentidos, que Honduras y Estados Unidos han colaborado, están y van 'a seguir colaborando en este esfuerzo tan complicado pero tan importante durante los años que vienen'.

También indicó sobre la nueva ley hondureña que permite el derribo de narcoavionetas que cada país tiene sus leyes, pero que 'nadie quiere ver derribados aviones o avionetas de inocentes'.

El gobernante hondureño considera que tras la visita en febrero pasado acompañando a Brownfield, el jefe del Comando Sur de Estados Unidos 'pudo llevar el tema del combate contra la droga al Congreso americano, expresando que no se puede descuidar a Centroamérica', aunque Washington discrepe con el derribo de avionetas.

El jueves, Kelly insistió en Washington ante el Comité de las Fuerzas Armadas sobre las consecuencias de 'un reducido compromiso' de Estados Unidos con Latinoamérica.

Además, expresó el temor a que los recortes presupuestarios, que incluyen el gasto del Pentágono y otras agencias, afecten la capacidad de Estados Unidos para contener el narcotráfico y asestar golpes a los cárteles de la droga en Latinoamérica.

También señaló que la transformación de países como Honduras o Guatemala en centros logísticos de la droga ha disparado la violencia y ha destruido instituciones públicas tan importantes como la policía o el poder judicial.

El presidente hondureño reconoce las limitaciones de su país en la lucha contra el narcotráfico, pero considera que lo importante es que su Gobierno ha comenzado a enfrentar con fuerza ese flagelo.

'Pero aquí no estamos para llorar, sino para ver cómo vamos a solventar un problema; si ya hemos empezado, creo que vamos con buenos pasos y firmes', expresó Hernández el viernes.