25/12/2024
10:05 AM

Aprobada la Ley de Pacientes Renales

La norma garantiza tratamiento oportuno.

Tegucigalpa. El Congreso aprobó la Ley Nacional de Pacientes Renales en respuesta al clamor de los hondureños que sufren este mal que los ha llevado a las calles a protestar para exigir tratamiento.

En Honduras hay más de 1,400 pacientes renales que necesitan a diario diálisis o hemodiálisis. Ellos durante años fueron víctimas de la irresponsabilidad del Gobierno, que no garantizaba sus medicamentos.

Según Edwin Fabricio Salazar, vicepresidente de la Asociación de Pacientes Renales, la normativa -que tendrá que ser publicada en los próximos días en el diario oficial La Gaceta- resuelve en gran medida la precariedad en la que se han mantenido los pacientes.

“Que el Estado sea garante del tratamiento tanto de diálisis como hemodiálisis peritoneal, a mejorar los centros públicos y también la expansión de los centros y de la atención en el ámbito nacional”, manifestó Salazar. “Con esta ley se pretende que el Estado tenga la extensión presupuestaria de tal manera que la cantidad de pacientes que hay en todo el país sea atendida en debida forma, de manera integral para que el paciente no tenga que exigirlo incluso en las calles”, agregó.

Salazar detalló que la ley contempla la creación de programas especiales para que el paciente pueda también recibir otros servicios como el de sicología. Cada semana un paciente renal debe ser sometido a tres sesiones de tratamiento en las que es conectado a unas máquinas durante casi cuatro horas para limpiar su sangre de las toxinas que el mismo cuerpo produce y que no pueden ser desechadas por la falla renal.

La solución real para estos pacientes es en definitiva el trasplante de riñón; sin embargo, el país aún no dispone de laboratorios de compatibilidad, por lo que este proceso debe ser practicado en otro país, y además de aumentar su costo se hace inaccesible para los enfermos.

La insuficiencia renal o fallo renal se produce cuando los riñones no son capaces de filtrar adecuadamente las toxinas y otras sustancias de desecho de la sangre. Fisiológicamente, la insuficiencia renal se describe como una disminución en el índice de filtrado glomerular, lo que se manifiesta en una presencia elevada de creatinina en el suero.