La propuesta de crear una policía militar en
Honduras
ha desatado la polémica y algunos analistas y políticos han alertado que empeorará la seguridad pública en el país, donde a diario mueren en promedio 20 personas de forma violenta
El proyecto es impulsado por el presidente del Parlamento de
Honduras, Juan Orlando Hernández, también candidato presidencial por el gobernante Partido Nacional en las elecciones generales de noviembre próximo.
Los sectores más críticos, incluido el ombudsman Ramón Custodio, consideran que el titular del Parlamento pretende militarizar la seguridad pública, lo que ha rechazado en varias ocasiones Hernández.
'No debe aprobarse esa ley para militarizar el país, eso sería un acto deleznable', subrayó a Efe uno de los vicepresidentes del Congreso Nacional, Marvin Ponce.
En opinión de Ponce, diputado del minoritario y opositor Partido Unificación Democrática, la iniciativa, denominada Policía Militar de Orden Público, 'atentaría contra la seguridad pública' de
Honduras.
El proyecto establece que unos 30.000 soldados en reserva de las Fuerzas Armadas conformen una Policía Militar para combatir la violencia en
Honduras.
Según el diputado opositor, la medida le otorgaría 'mucho poder a los militares, que estuvieron casi 20 años' al mando del país, hasta 1980, cuando retornó a la democracia.
La Constitución de
Honduras
establece 'el rol' de los militares, apuntó Ponce, tras señalar que para combatir la criminalidad es necesario 'fortalecer' la Policía Nacional, en depuración desde 2011.
Hernández reiteró el pasado miércoles que 'es necesario' la presencia de los militares en las calles para combatir la inseguridad que golpea a
Honduras.
'Les pido a los demás candidatos (presidenciales) que se oponen a que los militares estén en labores de seguridad que no intenten destruir a las Fuerzas Armadas', enfatizó.
El presidente hondureño, Porfirio Lobo, aprobó en 2011 la participación de militares en operativos policiales, estrategia que, según diversos sectores, no ha funcionado.
Xiomara Castro, candidata a la presidencia por el Partido Libertad y Refundación (Libre) y esposa del expresidente Manuel Zelaya, dijo el pasado viernes que de ganar los comicios los militares no seguirán colaborando con la Policía en las operaciones de seguridad pública.
'Hay que fortalecer y profesionalizar la Policía Nacional. Los militares deben retornar a su labor de defender la soberanía y el territorio', indicó la esposa de Zelaya, derrocado en 2009 cuando promovía una consulta popular para reformar la Constitución pese a tener impedimentos legales para ello.
La presencia de militares en las calles hondureñas, según Castro, 'no ha resuelto el problema de violencia'.
En declaraciones a Acan-Efe el analista político Raúl Pineda dijo que involucrar a los militares en el combate del crimen organizado y la delincuencia común 'históricamente no ha funcionado y resulta peligroso, porque al país le costo muchos años hacer que el Ejército asumiera su rol'.
Además, abogó porque se 'depure y modernice' la Policía Nacional, de lo contrario la crisis de inseguridad 'se va seguir reflejando'.
El Centro de Prevención Tratamiento y Rehabilitación de Víctimas de la Tortura rechaza la iniciativa, que en su opinión, aumentaría 'la militarización de la sociedad'.