Por tercera ocasión consecutiva, el gobierno de Porfirio Lobo Sosa reprobó en los principales indicadores que miden los avances del país en materia económica, derechos humanos y educación primaria y salud infantil. En la parte de gobernabilidad y justicia se valoran los derechos humanos, libertades civiles, libertad de información, gobierno efectivo, Estado de derecho y control de la corrupción.
Estos indicadores se toman de diferentes fuentes y organismos internacionales, entre ellos el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y las Naciones Unidas.
Corrupción, el talón de Aquiles
El combate contra la corrupción representó el talón de Aquiles de la actual administración gubernamental, puesto que en las tres últimas valoraciones ha resultado aplazada en esta área, aunque los funcionarios aducen que hubo mejoras que no se perciben. Según la evaluación hecha en 2012, las fallas y los pocos avances en el control de la corrupción fueron un factor determinante para que Honduras quedara nuevamente marginada de acceder a un compacto de asistencia no reembolsable de la Cuenta del Milenio para el presente año.
Además de este indicador, el Gobierno salió aplazado en libertad de información, que mide los resultados en el respeto de las garantías de acceso a la información, libertad de prensa y protección de los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación.
Un punto negativo del Gobierno en este aspecto ha sido el asesinato de más de una veintena de trabajadores de los medios de comunicación en lo que va de la gestión de Porfirio Lobo, sin contar las amenazas y los ataques que han sufrido los medios de información.
Un informe del Comisionado de Derechos Humanos (Conadeh) reveló que en 35 meses del Gobierno murieron violentamente 27 comunicadores, pero además se registraron secuestros, atentados, persecuciones, amenazas a muerte, extorsiones, ataques a parientes, agresiones e incluso el exilio de varios comunicadores.
El Gobierno tampoco logró superar o mostró débiles avances en otros ocho indicadores: política fiscal, apertura de nuevas empresas, economía de género, derecho de acceso a la tierra, salud infantil, gobierno efectivo, Estado de derecho y tasas de acceso de niñas a la educación secundaria.
Un consuelo
La junta directiva de la MCC, en su última reunión que presidió el secretario de Estado de EUA, John Kerry, aprobó 15.6 millones de dólares, unos 312 millones de lempiras, bajo el Programa Umbral, fondos dirigidos a mejorar los indicadores en los que Honduras mostró deficiencias.
El Programa Umbral se ejecuta por un período de tres años, durante el cual el Gobierno deberá mostrar mejoras en transparencia fiscal,compras y contrataciones, combate contra la corrupción y alianzas público-privadas, entre otros, para solicitar un nuevo compacto de la MCC.
En 2005, durante la administración del expresidente Ricardo Maduro, el Gobierno recibió su primer paquete o compacto de ayuda de la Cuenta de Desafío del Milenio por 215 millones de dólares, cuya ejecución concluyó satisfactoriamente en 2010. De este monto, Estados Unidos determinó retirar 10 millones en castigo por la defenestración del expresidente Manuel Zelaya Rosales en junio de 2009.
De 2010 a la fecha, el gobierno de Lobo Sosa ha intentado infructuosamente acceder a un nuevo paquete de ayuda, pero en las tres oportunidades que lo ha hecho resultó aplazado en materia de corrupción, uno de los indicadores más importantes, así como el respeto de los derechos humanos, que prácticamente le cerraron las puertas al país.
Según las fuentes consultadas, el Gobierno actual prácticamente perdió la esperanza de contar con nuevas ayudas de la Cuenta del Milenio, por lo que le quedará a la nueva administración que asuma en enero de 2014 darles seguimiento y mejorar los indicadores.
En este aspecto, el Programa Umbral es importante para alcanzar esa meta; de lo contrario, el país nuevamente quedará al margen de la cooperación estadounidense. En 2011, Honduras fue reprobado y ese año se le permitió su ingreso al Programa Umbral gracias a los avances que mantuvo, como haber mejorado sus indicadores de ingreso per cápita, que lo coloca en el grupo de países con ingreso mediano bajo.
Esfuerzos insuficientes
El expresidente del Banco Central de Honduras (BCH), Hugo Noé Pino, valoró que los resultados solo demuestran que el Gobierno actual no ha realizado suficientes esfuerzos para mejorar los indicadores de gobernabilidad, política fiscal y derechos humanos.
Lamentó que nuevamente el país haya quedado al margen de los beneficios de la Cuenta del Milenio, ya que el primer paquete de ayuda permitió concluir importantes proyectos de desarrollo rural y obras de infraestructura, entre ellas, la carretera que de Tegucigalpa conduce al norte.
“Lo que demuestra esta situación es que el Gobierno no ha hecho suficientes esfuerzos para calificar nuevamente en los aspectos de corrupción, derechos humanos y política fiscal, algo en lo que el Gobierno había avanzado en 2010 y 2011, pero tuvo un retroceso muy fuerte”, deploró.
El también representante del Instituto de Estudios Fiscales (Icefi) señaló que la situación y los indicadores puedan mejorar el próximo año con el nuevo Gobierno, lo que permitirá aspirar a recursos que el país necesita para salir de la crisis fiscal.
Dijo que a escala regional e internacional se está viendo a Honduras con mucha preocupación por los altos niveles de violencia y los problemas que atraviesa en el ámbito económico y fiscal.
Lamentó que el Gobierno ha hecho oídos sordos a las recomendaciones de sectores para afrontar los problemas económicos y sociales, por lo que únicamente queda que el tiempo pase rápido para que asuma una nueva administración más responsable con los intereses nacionales.
Competencia por fondos
El director de la Cuenta del Milenio Honduras, Marco Bográn, reconoció que el indicador que más ha afectado en los años anteriores ha sido la lucha contra la corrupción, en vista de que se basa en la percepción del sector empresarial, la ciudadanía y la cooperación internacional presente en el país sobre el funcionamiento del Gobierno en su conjunto.
“Lo que refleja el indicador es cómo la gente percibe que funcionan esas instituciones y lastimosamente la corrupción, aunque ha ido mejorando ligeramente en los últimos tres años, todavía no ha llegado a alcanzar la calificación requerida para ser elegible para un compacto, que es estar en la media o sobre la media de los demás países competidores”, dijo.
Señaló que Honduras compite con naciones que no han alcanzado el progreso y son considerados países en vías de desarrollo. Esa competencia es medida cada año con los indicadores de la Cuenta de Desafío del Milenio, de modo que quienes obtienen las mejores calificaciones son los que reciben la ayuda de EUA.
Reiteró que lastimosamente Honduras no ha podido superar varios de los indicadores, principalmente el control de la corrupción. “En la medida en que el Gobierno de Estados Unidos atraviesa esta crisis fiscal, los recursos de que disponen para cooperar con los países amigos son cada vez menos. Entonces, la competencia se está haciendo cada vez más dura y feroz”.
Bográn recordó que, el año pasado, Honduras fue declarada inelegible para un nuevo compacto de cooperación, pero fue incluido en el Programa Umbral, que ya es un paso más cercano a un nuevo paquete de ayuda de la MCC porque se trabaja en mejorar los indicadores en los que ha salido aplazado.
“Aunque las reglas no prohíben que se implemente paralelamente un Programa Umbral y un compacto, lo más probable es que tendremos capacidad de ser elegibles para un compacto hasta que hayamos terminado el Programa Umbral, porque en ese momento se verán los resultados”.
Mejora en ingreso per cápita afectó los indicadores
El viceministro de la Presidencia, Rodrigo García, defendió los avances en varios de los indicadores de la Cuenta del Milenio, pero reconoció que el control de la corrupción afectó para que el país no recibiera un nuevo paquete de cooperación de Estados Unidos mediante esta iniciativa.
Reconoció que los resultados de la tabla de indicadores fueron los elementos que incidieron en que la MCC tomara la decisión de no declarar elegible a Honduras para un nuevo compacto de ayuda.
Destacó que Honduras se beneficia de un Programa Umbral, que es clave futura para superar los indicadores en que el país muestra debilidades y así ser elegible para un nuevo paquete de ayuda, aunque reconoció que eso le corresponderá al próximo Gobierno.
“Siempre continuamos los trabajos que hemos estado haciendo para incidir en los indicadores. Haber reprobado en 10 de los 20 indicadores no significa que retrocedimos en los avances que hemos hecho”, dijo.
Explicó que Honduras mejoró en ingreso per cápita y eso le permitió colocarse dentro de la clasificación de la MCC en una categoría de países con ingreso bajo medio, lo que dio lugar a que la barra y la media por cumplir subieran un poco. Eso provocó que saliera reprobado en 10 de los indicadores.
“Por eso fue el efecto de que aparecieran 10 indicadores rojos, pero los indicadores puros mostraron mejoras durante el último período y seguimos trabajando para mejorar este año, o sea que al final de 2013, cuando se vuelva a reunir la junta directiva de la MCC, nos volverán a evaluar para una posible elegibilidad”.