La Misión de Observación Electoral (MOE) de la OEA presentó un informe a la Secretaría General de ese organismo sobre el proceso electoral en Honduras, en el que recomienda, entre otras cosas, la restitución inmediata de todas las garantías constitucionales.
'La Secretaría General de la OEA considera desproporcionada la aplicación de estas medidas frente a las manifestaciones que tuvieron lugar tras las ya denunciadas irregularidades del acto electoral llevado a cabo el 26 de noviembre de 2017, y solicita el inmediato levantamiento de las mismas', explica el informe en referencia a la suspensión de los derechos constitucionales relacionados al Decreto del 1 de Diciembre de 2017 emitido por el Gobierno de Honduras.
El informa señala que la falta de garantías y transparencia, así como por el cúmulo de irregularidades, errores y problemas sistémicos que han rodeado este proceso electoral, en su etapa previa, jornada electoral y etapa postelectoral, no le permiten a esa Misión tener certeza sobre los resultados.
Agrega que no es posible, sin un proceso exhaustivo y minucioso de verificación que determine la existencia o no de un fraude electoral -como ha denunciado parte de la oposición-, restituir la confianza de la población en el proceso.
El informe establecer que si las irregularidades existentes fueran de tal entidad que hicieran imposible que el proceso brinde certeza y seguridad en el recuento, 'la Misión se reserva el derecho de realizar las recomendaciones adicionales que considere pertinentes sobre cualquier aspecto del mismo, sin descartar inclusive la posibilidad de recomendar un nuevo llamado a elecciones con garantías de que corrijan todas las debilidades identificadas que dieron lugar a las irregularidades graves que se detectasen'.
Las recomendaciones
La Secretaría General de la OEA reitera que el proceso electoral en la República de Honduras no ha concluido, por cuanto resta para ello la implementación completa de las recomendaciones que siguen a continuación:
1. El cotejo de las 1.006 actas que fueron sometidas a escrutinio especial con las originales recibidas, para ver si son parte de aquellas que fueron transmitidas online o parte de aquellas que fueron procesadas una vez llegaron al Centro de Acopio Nacional Electoral, ubicado en las instalaciones del INFOP.
2. La verificación de las 5.174 actas del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que no fueron transmitidas la noche de la elección, realizando un recuento de votos de las actas que presenten inconsistencias.
3. La revisión de la participación en la votación de los departamentos de Lempira, Intibucá y la Paz, tomando el 100% de las Mesas Electorales Receptoras (MERs) de cada uno de los departamentos.
4. El establecimiento de una etapa razonable para la presentación de impugnaciones. Debido a los retrasos en los escrutinios ordinario y especial, se exhorta al Tribunal Supremo Electoral a ser flexible en la recepción de estas impugnaciones y a resolverlas con todas las garantías procesales, de forma individualizada tras un cuidadoso análisis debidamente fundado y motivado.
5. La publicación de los listados de los miembros de las MERs de los departamentos de Atlántida, Colón, Cortés, Francisco Morazán y Yoro.
6. La verificación de la integridad del Sistema Integrado de Escrutinio y Divulgación Electoral (SIEDE) y de sus componentes.
El informe agrega que el candidato presidencial Juan Orlando Hernández Alvarado ha admitido las conclusiones y recomendaciones del informe de la MOE, y ha manifestado su compromiso de someter al escrutinio técnico con acompañamiento de los observadores internacionales los resultados de las elecciones.
'Lamentablemente, pese al sustento técnico y de base científica de las recomendaciones de la MOE, no ha sido posible llegar a un acuerdo firmado'.
La Secretaría General de la OEA resalta que no dejará solos a los hondureños y reafirma su máxima vocación para contribuir a resolver las diferencias en torno al proceso electoral. Por ello, la MOE se mantiene para continuar su apoyo técnico-político.
No a la violencia
El organismo lamenta la desconfianza y polarización que han generado episodios insostenibles de violencia 'alentados por los llamados públicos de amotinamiento e insurrección militar realizados en el contexto postelectoral y la utilización de fusiles de asalto en poder de particulares por parte de líderes partidarios'.
La Secretaría General de la OEA condena, asimismo, las muertes acaecidas y exige la inmediata investigación de los hechos, al tiempo que expresa sus condolencias y se solidariza con el dolor de las familias de las víctimas.
'El proceso electoral es por excelencia la manifestación de la expresión popular, y la democracia no puede ni debe ser menoscabada por irregularidades graves, represión y muertes. Es imprescindible que se den garantías suficientes para que la violencia sea detenida inmediatamente'.