Tegucigalpa, Honduras.
La modelo y expalillona Ilsa Vanessa Molina negó que Insumedic surgiera por la relación que sostuvo con el entonces jefe de Compras del Seguro Social, José Zelaya Guevara.
La joven reiteró ayer que no se arrepiente de sus actuaciones como representante legal de la empresa Insumedic.
“Somos seres humanos y cometemos errores; no me arrepiento de nada porque soy una persona normal, luchadora. He sacado adelante mi vida, he defendido mi dignidad y honorabilidad”, manifestó.
Repitió ayer que sus actuaciones se basaron en ley y dijo que no cuenta con solvencia económica, que efectuó negocios legales por medio de la empresa Insumedic en la venta de guantes, gasas, algodón, papel higiénico, jeringas y sondas, no de equipos médicos.
La empresa Insumedic se dedicó a suministros médicos; no era una firma fantasma, afirmó. Esta compañía se creó en junio de 2012, antes de que conociera a José Zelaya, con quien en noviembre de ese año empezó una vida sentimental que terminó en septiembre de 2013. “Lo conozco cuando entra en relación con los contratos que hago con el Seguro”, admitió Ilsa Molina. En septiembre de 2012, Ilsa Molina empezó a fungir como representante de dicha empresa.
Por consiguiente rechazó que Insumedic, cuyos socios eran José David Cardona y Vanessa Cardona, se hubiera aprovechado de su relación con Zelaya para vender insumos al IHSS.
Informó que mientras representó legalmente a Insumedic gestionó contratos con el IHSS por 12 millones de lempiras. De estos pagaron 9.2 millones por medio de cheques a nombre de Insumedic. Hay un saldo de 2.8 millones de lempiras, que el IHSS adeuda a Insumedic. Afirmó que esta empresa entregó todos los insumos al IHSS y aseguró que posee evidencia de soporte.
Al consultarle por qué la empresa no pagó impuestos, dijo que estaba en trámite el permiso de operación.
Su madre declara
Damaris Aguirre, madre de la exmodelo Ilsa Vanessa Molina, se presentó ayer a declarar en el Ministerio Público.
Aguirre fue citada por el Ministerio Público debido a la incautación de una vivienda valorada en 2.5 millones de lempiras en Villa Las Hadas, de la cual figura como propietaria.
La residencia fue asegurada el 18 de julio pasado y aparece en la lista de 32 bienes que, de acuerdo con investigaciones del Ministerio Público, habrían sido comprados con fondos del Seguro Social.
La casa de Damaris Aguirre en Villa Las Hadas fue comprada a una droguería que está incluida en la lista de compañías a las que el IHSS les pagó contratos mediante líneas de crédito sin respaldo, de acuerdo con la comisión interventora del Seguro Social.
Isla Vanessa Molina declaró el miércoles ante las autoridades del Ministerio Público sobre su vinculación con fondos del IHSS por medio de la compañía Insumedic, a la que el Seguro Social pagó 9.2 millones de lempiras por contratos de suministros de productos médicos que según la investigación de la Fiscalía nunca llegaron a la institución.
Héctor Durán, abogado de la expalillona, declaró que la empresa quebró porque el Instituto Hondureño de Seguridad Social aún le adeuda tres millones de lempiras.
La modelo y expalillona Ilsa Vanessa Molina negó que Insumedic surgiera por la relación que sostuvo con el entonces jefe de Compras del Seguro Social, José Zelaya Guevara.
La joven reiteró ayer que no se arrepiente de sus actuaciones como representante legal de la empresa Insumedic.
“Somos seres humanos y cometemos errores; no me arrepiento de nada porque soy una persona normal, luchadora. He sacado adelante mi vida, he defendido mi dignidad y honorabilidad”, manifestó.
Repitió ayer que sus actuaciones se basaron en ley y dijo que no cuenta con solvencia económica, que efectuó negocios legales por medio de la empresa Insumedic en la venta de guantes, gasas, algodón, papel higiénico, jeringas y sondas, no de equipos médicos.
La empresa Insumedic se dedicó a suministros médicos; no era una firma fantasma, afirmó. Esta compañía se creó en junio de 2012, antes de que conociera a José Zelaya, con quien en noviembre de ese año empezó una vida sentimental que terminó en septiembre de 2013. “Lo conozco cuando entra en relación con los contratos que hago con el Seguro”, admitió Ilsa Molina. En septiembre de 2012, Ilsa Molina empezó a fungir como representante de dicha empresa.
Por consiguiente rechazó que Insumedic, cuyos socios eran José David Cardona y Vanessa Cardona, se hubiera aprovechado de su relación con Zelaya para vender insumos al IHSS.
Informó que mientras representó legalmente a Insumedic gestionó contratos con el IHSS por 12 millones de lempiras. De estos pagaron 9.2 millones por medio de cheques a nombre de Insumedic. Hay un saldo de 2.8 millones de lempiras, que el IHSS adeuda a Insumedic. Afirmó que esta empresa entregó todos los insumos al IHSS y aseguró que posee evidencia de soporte.
Al consultarle por qué la empresa no pagó impuestos, dijo que estaba en trámite el permiso de operación.
Su madre declara
Damaris Aguirre, madre de la exmodelo Ilsa Vanessa Molina, se presentó ayer a declarar en el Ministerio Público.
Aguirre fue citada por el Ministerio Público debido a la incautación de una vivienda valorada en 2.5 millones de lempiras en Villa Las Hadas, de la cual figura como propietaria.
La residencia fue asegurada el 18 de julio pasado y aparece en la lista de 32 bienes que, de acuerdo con investigaciones del Ministerio Público, habrían sido comprados con fondos del Seguro Social.
La casa de Damaris Aguirre en Villa Las Hadas fue comprada a una droguería que está incluida en la lista de compañías a las que el IHSS les pagó contratos mediante líneas de crédito sin respaldo, de acuerdo con la comisión interventora del Seguro Social.
Isla Vanessa Molina declaró el miércoles ante las autoridades del Ministerio Público sobre su vinculación con fondos del IHSS por medio de la compañía Insumedic, a la que el Seguro Social pagó 9.2 millones de lempiras por contratos de suministros de productos médicos que según la investigación de la Fiscalía nunca llegaron a la institución.
Héctor Durán, abogado de la expalillona, declaró que la empresa quebró porque el Instituto Hondureño de Seguridad Social aún le adeuda tres millones de lempiras.