Estados Unidos.
Sobrepasado por el flujo de niños indocumentados que llegan solos a la frontera estadounidense en un promedio de 90 por día, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha decidido imprimir rapidez a un proceso que generalmente lleva a la deportación, pero pasa antes por largos meses de detención de los menores en centros desbordados. Obama pedirá hoy al Congreso que le permita acelerar la deportación de los niños centroamericanos que llegan a la frontera, al dar mayor flexibilidad a su Gobierno para repatriarlos y destinar otros 2,000 millones de dólares a la crisis, informó ayer una fuente oficial.
Hoy lunes, la Casa Blanca enviará una carta que informa al Congreso sobre la petición de más recursos y flexibilidad para lidiar con el aumento significativo en detenciones de migrantes.
Sobrepasado por el flujo de niños indocumentados que llegan solos a la frontera estadounidense en un promedio de 90 por día, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha decidido imprimir rapidez a un proceso que generalmente lleva a la deportación, pero pasa antes por largos meses de detención de los menores en centros desbordados. Obama pedirá hoy al Congreso que le permita acelerar la deportación de los niños centroamericanos que llegan a la frontera, al dar mayor flexibilidad a su Gobierno para repatriarlos y destinar otros 2,000 millones de dólares a la crisis, informó ayer una fuente oficial.
Hoy lunes, la Casa Blanca enviará una carta que informa al Congreso sobre la petición de más recursos y flexibilidad para lidiar con el aumento significativo en detenciones de migrantes.
Ver especial multimedia: Niños migrantes solos en frontera
Obama pedirá en primer lugar al Congreso que revise las normas actuales para dar más autoridad al secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, con el fin de acelerar la deportación de los niños procedentes de Honduras, Guatemala y El Salvador.
La ley estadounidense prohíbe al Departamento de Seguridad Nacional deportar a los niños inmigrantes inmediatamente después de su llegada al país si su nación de origen no comparte una frontera con EUA, como ocurre con los menores centroamericanos.
El objetivo del Gobierno de Obama es obtener la autorización del Congreso para hacer ese proceso más similar al de los niños que llegan desde México, que pueden ser deportados fácilmente poco después de su entrada en el país. Actualmente, los niños centroamericanos interceptados al llegar a EUA son reubicados en instituciones federales o con parientes dentro a la espera de que su caso avance a través del sistema de justicia migratoria estadounidense, un proceso lento pero que al final conduce a la deportación en la mayoría de los casos.
El Gobierno de EUA ha adoptado últimamente un tono más duro para advertir que los niños que están llegando a la frontera entran en un proceso de deportación y no podrán acogerse a la reforma migratoria que debate el Congreso ni a otras políticas en vigor.
Hasta ahora, el gobierno de Obama ha anunciado medidas como la apertura de nuevos centros que sirven como albergues para los niños, el último de ellos inaugurado este viernes en Artesia (Nuevo México), pero ve cómo los recursos que dedica al problema se consumen rápidamente ante la creciente llegada de los menores.
Video: Niños hondureños se reúnen con sus padres
La Casa Blanca también pedirá al Congreso más flexibilidad para “aumentar las penas” contra los “coyotes” y aquellos que “trafican con migrantes vulnerables, como los niños”, según una fuente de la Casa Blanca.
Se esperará a que el Congreso vuelva de su receso actual, que dura hasta el 7 de julio, para presentar formalmente la solicitud de nuevos fondos.
El dinero se dedicaría a “detener, procesar y cuidar adecuadamente a los niños” en la frontera, que suman unos 52,000 en los últimos nueve meses.
La legislación incluiría además “una estrategia agresiva de disuasión centrada en la deportación y repatriación de inmigrantes” que han llegado “recientemente” al país, un auge “sostenido” en la seguridad en la frontera y un aumento “significativo” de los jueces de inmigración, que se dedicarían con prioridad a la crisis.
Por último, los fondos permitirían aumentar la cooperación con los países de Centroamérica para repatriar a los inmigrantes, “afrontar las causas” de la migración y “comunicar las realidades de estos viajes peligrosos” a los ciudadanos centroamericanos.
100 mil en dos años
El flujo de menores hondureños que emigran del país supera los cien mil en los últimos dos años y medio. Según un documento oficial, de 2012 a la fecha han salido 116,363 menores, la mayoría con uno de sus padres.
Pero ha sido el hacinamiento en centros de detención en los estados fronterizos de Estados Unidos con México lo que desató la alarma en Honduras, Guatemala y El Salvador acerca de la crisis humanitaria de los niños migrantes ilegales.
Han llegado hasta allá la mayoría con permiso de sus padres, acompañados de un familiar o solos, al cuidado de traficantes.
En apenas seis meses de 2014 han salido legalmente de Honduras 24,236 niños y niñas entre los aeropuertos de Toncontín, La Mesa y la aduana terrestre de Corinto, frontera con Guatemala.
Vea: Niños de Honduras hacinados en centros de EUA
De enero a junio de 2014, la salida de hondureños menores con autorización por la delegación de Corinto asciende a 3,214. Por esta aduana, 2,640 menores salieron por puntos no controlados. En las mismas fechas, por la aduana de Agua Caliente, también frontera con Guatemala, salieron 3,214 menores, unos 2,600 de ellos se fueron por puntos ciegos.
Para el director de Migraciones Internacionales, Amílcar Sánchez, es muy difícil conocer el motivo real por el que viajan los migrantes, especialmente en las delegaciones terrestres.
Cifras de Migración y Extranjería revelan que en 2013 salieron vía terrestre 92,638 hondureños, entre adultos y menores de edad, por las aduanas fronterizas con Guatemala.
“Pero hay cerca de 16 sitios no controlados (puntos ciegos), que son utilizados cuando no llenan los requisitos para salir legalmente del país”, dijo Sánchez.
Deportaciones
México es el país que más deporta hondureños adultos y menores, incluso más que Estados Unidos. En 2013 deportaron 37,748, de los cuales 3,703 eran menores. En lo que va de 2014 han deportado 18,981 hondureños, 3,719 menores.
“En los últimos días se han retornado más de 800 personas, de estas un 12% son niños no acompañados. De Tapachula se retornaron 262, de los cuales 35 eran menores no acompañados y 117 estaban con sus padres”, indicó el embajador de Honduras en México, Mariano Castillo.
Las deportaciones de hondureños desde México continúan desde Acayucan, Iztapalapa y San Luis Potosí. “Solo en tres días hemos retornado 847 hondureños”, afirmó el embajador.
Fotos: Así lloró la primera Dama de Honduras en albergues
Según Castillo, las condiciones de los albergues para menores de edad migrantes en México son muy diferentes a las de EUA, ya que la nueva política migratoria los ha mejorado.
“Aquí los menores no acompañados los atiende el Sistema de Desarrollo Integral de la Familia, los tratan muy bien, lo hemos constatado hasta que son retornados a Honduras. Desde México no se deporta, se retorna de manera asistida”.
Comisión Fuerza de Tarea
Ante la migración de menores y adultos sin precedentes desde Honduras hasta Estados Unidos, la comisión Fuerza de Tarea que el Gobierno designó para recibir a los pequeños en San Pedro Sula continúa preparándose. “Seguimos recibiendo niños y familias desde México. Tenemos equipo médico y alimentos”, dijo el secretario de Desarrollo Social, Lisandro Rosales.
