En seis meses se empezarán a instalar en Honduras unos 250,000 contadores prepago con los que el usuario solo podrá consumir la energía que compre anticipadamente, pero estos aparatos solo se pondrán en casas o negocios de clientes morosos reincidentes o en zonas donde se roba energía, dijo Jesús Arturo Mejía, gerente general de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee).
Esta modalidad será implementada por la Empresa Energía Honduras (EEH), un operador privado contratado por la Enee para encargarse de la distribución energética del país por siete años.
EHH empezó operaciones esta semana.
En una entrevista con Diario LA PRENSA, Mejía declaró que “no habrá tarjetas prepago de energía”, pues la electricidad se venderá mediante mensajes de celular o Internet, entre otros métodos, y aseguró que se podrá comprar a toda hora.
Mejía aclaró que los clientes de la Enee que pagan su energía puntualmente seguirán usando el sistema actual de suministro eléctrico y utilizarán los mismos contadores que ya tienen, sin cambio alguno.
Se contrató a un operador privado solo por siete años. A este operador le pagará la Enee. En el corto plazo, el operador dará mantenimiento y solución a los problemas en la red de distribución. Estos problemas no los resolvía la Enee por la falta de recursos. EEH sí solucionará el problema porque tienen los recursos. En el largo plazo se reducirán las pérdidas de energía. Ahora están en 33%, y esperamos queden en 16%. Por cada punto que bajemos de pérdidas de energía será al mes 1.1 millones de dólares más en la facturación para la Enee. Esto además del buen funcionamiento de la empresa garantizará el mejoramiento de sus finanzas.
Quiero aclarar que no habrá tarjetas prepago para recargar energía. Eso es una mentira. La venta prepago de energía se manejará a través de transacciones electrónicas, ya sea por celulares, en la banca, supermercados, entre otros métodos. La energía prepago se dará con un medidor que se instalará en las casas en las zonas donde la gente no tenga la capacidad de pago para tener un servicio pospago. Así controlarán sus finanzas y garantizarán no endeudarse con la Enee. Así la gente solo consumirá lo que paga. Si se quedan sin energía compran otra recarga y listo. A cualquier hora, todos los días y desde cualquier medio se podrá comprar.
Quienes son clientes de la Enee y pagan puntualmente su energía seguirán con el servicio tal y como está ahora, sin ningún cambio, pero si una persona empieza a ser impuntual con su pago perderá su calidad de cliente pospago y se le pondrá el contador prepago. Quienes tengan historial de morosos o son de zonas donde se roba energía tendrán contadores prepago. Si no compran energía por anticipado no tendrán el servicio.
Primero se abordará el tema de las pérdidas técnicas. Después el de las pérdidas no técnicas, que son los robos de energía. Entonces, dentro de seis meses se comenzará a poner los contadores prepago en el país.
La Enee tiene 1.6 millones de usuarios que reciben la energía con el formato pospago; o sea, que primero se les da la energía y después se les cobra. De esos 1.6 millones de usuarios hay entre 1.3 y 1.4 millones que cumplen los requisitos para seguir siendo clientes pospago, pero hay unos 250,000 clientes con problemas de pago, por lo que se pondrán unos 250,000 contadores de energía prepago. Probablemente, la mayoría se instalará en zonas urbano marginales, donde se presenta la mayor cantidad de casos de problemas de pago de energía eléctrica.
Es una mezcla. Entre personal de la Enee y trabajadores nuevos. El problema con empleados de la Enee es que ganaban sueldos demasiado altos, por eso se contrató a otros nuevos. En total, la empresa quedó con unos 1,500 empleados.
Claro, es la idea de poner el operador. El servicio será de calidad y el operador cuenta con los recursos para dar 100% de respuesta, aunque ahora que se viene empezando pedimos algo de paciencia a la población.
Una de las metas es que para el próximo verano se reduzcan los apagones en forma notable. Es difícil decir que no habrá más apagones, pero sí se reducirán.
El cambio se logrará. El contrato por siete años es por un tema financiero más que operativo. Creo que EEH tendrá en tres o cuatro años la red en excelente condición.