Tegucigalpa, Honduras.
Sergio Rodríguez, uno de los acusados del asesinato de la ambientalista hondureña Berta Cáceres, rompió el silencio desde prisión.
Familiares y amigos de Rodríguez participaron de una misa para pedir su libertad y él envió una carta desde Támara.
El exgerente de la hidroeléctrica que gestionaba el proyecto 'Agua Zarca' dice estar viviendo un calvario.
“Han sido tiempos difíciles, especialmente porque soy inocente. Sin existir ninguna prueba en mi contra, me ha tocado vivir este calvario, el cual no se reduce al confinamiento injustificado, sino que al padecimiento que vive mi familia, en especial mi hija, al no poder seguir creciendo junto a su padre”, expresó.
| Vil asesinato
Berta Cáceres fue asesinada el pasado tres de marzo en su residencia en La Esperanza, Intibucá. Dos hombres armados ingresaron a su vivienda y le dispararon.
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Agrega que el verdadero culpable del asesinato de Cáceres está en libertad.
“El dolor que siento en estos momentos, se ve agravado porque el verdadero responsable aún está en libertad. El verdadero responsable sabe el daño que nos causa al mantener su mentira para inculpar a un hombre inocente”.
Los abogados de Rodríguez se presentarán ante la Corte para exigir su libertad, alegando que no existen pruebas en su contra y que las presentadas por el Ministerio Público fueron manipuladas.
La Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) ha revelado que tres de los cuatro detenidos son autores intelectuales del crimen y uno el material.
A Rodríguez se le acusa de haber contratado a los individuos que cometieron el crimen. Rodríguez había sido denunciado por intimidación y amenazas por la misma Berta Cáceres en una entrevista que concedió al periodista sueco Dick Emanuelsson en diciembre de 2013.
 Los familiares y amigos de Sergio Rodríguez realizaron una misa en el San Juan Bosco en Tegucigalpa para exigir su libertad.
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