Con el salario que devengan, los diputados de Costa Rica y Guatemala (las dos economías más fuertes de la región) gozan de la suerte de tener el mayor poder adquisitivo que sus colegas de El Salvador, Nicaragua y Honduras.
Según los portales de transparencia de las asambleas legislativas, en tres de los cinco países de Centroamérica es donde los parlamentarios reciben un salario nominal más alto (más dólares): en Costa Rica $6,920.44, en El Salvador 4,025.72 y en Nicaragua $3,221.
Sin embargo, ganar más unidades monetarias no significa que todos ellos tienen un mayor poder adquisitivo, pues los precios de los productos y servicios contrastan en los países de la región.
Por ejemplo, los de El Salvador y Nicaragua reciben más dólares, pero los parlamentarios de Guatemala pueden comprar más productos y servicios que ellos, aunque registren un ingreso inferior de $3,136.36.
Tomando como referencia la teoría, la paridad del poder adquisitivo (PPA), empleada por la revista inglesa The Economist para elaborar el índice Big Mac, con un salario de $3,136.36, los guatemaltecos pueden comprar 875 hamburguesas Big Mac en McDonald’s de ese país. Mientras, los salvadoreños con una suma superior ($4,025.72) adquieren 676.55 Big Mac en los restaurantes locales.
La teoría de la paridad del poder adquisitivo plantea que un consumidor debe adquirir con un dólar la misma cantidad de bienes y servicios en cualquier país, mas esto no sucede por los efectos de la inflación.
Los diputados de Costa Rica, por ganar más dólares y por tener hamburguesas menos caras ($4.20) que en los países de la región (excepto Nicaragua), pueden comprar 1,647.72 unidades.
Los diputados hondureños se encuentran en desventaja porque se desempeñan en la segunda economía menos desarrollada de la región, con un producto interno bruto (PIB) de más de $20 mil millones al año, que solo supera a Nicaragua ($12,690 millones), de acuerdo con cifras de 2015 del Banco Mundial (BM).
Un diputado hondureño que no tiene un cargo directivo devenga un salario de L55,000 ($2,388.84), según el portal de transparencia del Congreso Nacional. Con esa suma, se convierte en el que menos gana (en unidades monetarias) en Centroamérica.
Al mismo tiempo, los diputados hondureños son los que tienen menos poder adquisitivo. Con ese salario solamente comprarían 438 Big Mac, dado que cada una tiene un precio de L137 ($5.95) en el restaurante de McDonald’s del centro de San Pedro Sula.
Tomando como referencia los datos de los sitios web de transparencia, los congresos de Honduras y Nicaragua gastan menos dinero en pago de salarios de diputados.
Honduras gasta menos en pago de diputados, pese a que es el segundo país con el mayor número de parlamentarios en la región, después de Guatemala.
El congreso hondureño, particularmente, posee mayor representatividad ciudadana: por cada 100,000 habitantes existe una tasa de 1.59 parlamentarios; es decir, 3 diputados por cada 200,000.