San Pedro Sula, Honduras.
Mantener a cinco hijos siendo madre soltera ya era complicado para María Carmen Mendoza (29), una operaria de maquila que se convirtió hace 38 días en madre de trillizos. “Son ocho hijos los que tengo y es complicado porque no estoy con el papá de los trillizos, aunque él me ayuda cuando puede. Yo estaba planificando con la inyección, así que no me explico qué paso, pero mis niños aquí están y los amo”, indicó Mendoza.
Los niños nacieron el 20 de mayo en el Instituto Hondureño de Seguridad Social, dos de ellos permanecieron 10 días en la Unidad de Cuidados Intensivos.
“Actualmente, los niños gozan de buena salud y han ganado peso, que es bueno”, expresó.
Kennet, Elí e Isaac son los nombres de los bebés que necesitan de la solidaridad de los hondureños para suplir algunas necesidades, ya que viven en una casa prestada y construida de madera vieja, bolsas en las paredes y piso de tierra, donde se filtra el agua cuando llueve.
“Trabajo pero el sueldo no me ajusta para mantenerlos a todos, mis compañeros de trabajo me han ayudado, pero estoy asustada. Hago entre 24 y 30 pepes por día, la lata de leche grande solo me dura tres días. Solo tengo nueve biberones y el paquete de 60 pañales dura día y medio, por eso también les pongo de tela. Necesito Ayuda”, clama María.
Para ayudar
Mantener a cinco hijos siendo madre soltera ya era complicado para María Carmen Mendoza (29), una operaria de maquila que se convirtió hace 38 días en madre de trillizos. “Son ocho hijos los que tengo y es complicado porque no estoy con el papá de los trillizos, aunque él me ayuda cuando puede. Yo estaba planificando con la inyección, así que no me explico qué paso, pero mis niños aquí están y los amo”, indicó Mendoza.
Los niños nacieron el 20 de mayo en el Instituto Hondureño de Seguridad Social, dos de ellos permanecieron 10 días en la Unidad de Cuidados Intensivos.
“Actualmente, los niños gozan de buena salud y han ganado peso, que es bueno”, expresó.
Kennet, Elí e Isaac son los nombres de los bebés que necesitan de la solidaridad de los hondureños para suplir algunas necesidades, ya que viven en una casa prestada y construida de madera vieja, bolsas en las paredes y piso de tierra, donde se filtra el agua cuando llueve.
“Trabajo pero el sueldo no me ajusta para mantenerlos a todos, mis compañeros de trabajo me han ayudado, pero estoy asustada. Hago entre 24 y 30 pepes por día, la lata de leche grande solo me dura tres días. Solo tengo nueve biberones y el paquete de 60 pañales dura día y medio, por eso también les pongo de tela. Necesito Ayuda”, clama María.
| La pequeña cocina de María Carmen Mendoza, madre de los trillizos.
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 Lo trillizos gozan de buena salud.
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Para ayudar
Uno de los cinco hijos mayores de la mujer tiene retos especiales y también necesita ayuda. Este año ninguno pudo entrar a la escuela por falta de recursos económicos.
“Le pago a mi mamá, a una hermana y una cuñada para que me ayuden a cuidarlos cuando tengo que salir a trabajar, ese es otro gasto que tengo que hacer. El sueldo se me hace cada vez más chiquito”, indicó la angustiada madre.
Para ayudar a esta familia puede comunicarse al 9604-4100 o hacer depósitos a la cuenta 2011-5290-30 en Davivienda a nombre de María Carmen Mendoza. “Unas 25 personas me han dicho que les regale uno de los niños, pero jamás haría eso, no estoy en la mejor condición económica, pero son mis hijos y los amo a todos y sé que Dios no nos deja solos”, concluyó Mendoza.
