Tegucigalpa, Honduras.
La intervención e investigaciones que los cuerpos de seguridad del Estado y el Ministerio Público realizan dentro del Registro Nacional de las Personas (RNP) para desbaratar la mafia que se encargó de documentar ilegalmente a centenares de ciudadanos de origen palestino y sirio comenzaron a arrojar los primeros resultados.
Para el caso, las indagaciones preliminares permitieron establecer que solamente con la clave de acceso de la jefa de archivo del Almacén Central, Leyla Lucila Obando, se efectuaron por lo menos 6,000 modificaciones a la base de datos de igual número de hondureños, cuyos datos de ciudadanía fueron asignados a extranjeros y otras personas de dudosos antecedentes.
Esta nueva revelación, sumado al supuesto involucramiento de altos ejecutivos del RNP en la inscripción anómala de decenas de palestinos y la posterior emisión de pasaportes a árabes en los consulados de Honduras en España, denota una entramada red de crimen organizado, explicaron agentes que participan en las investigaciones.
Las fuentes informaron a LA PRENSA que producto de la intervención que se hizo a las oficinas del RNP en Tegucigalpa el pasado 24 de mayo, se ha encontrado abundante y valiosa información que servirá de base para llevar ante la justicia a los implicados en este vergonzoso acto ilegal de venta de la nacionalidad hondureña.
A raíz de la investigación publicada por
LA PRENSA en el sentido que gran parte de las alteraciones a la base de datos se realizaron desde el Almacén Central del RNP, los investigadores procedieron a intervenir el ordenador de la jefa de archivo y se encontraron con la sorpresa que con su clave de acceso se realizaron miles de alteraciones en la base de datos.
Es decir, que tomaban los datos de un hondureño fallecido o que nunca tramitó su tarjeta de identidad, los alteraban y se los asignaban a un palestino u otra persona que solicitara la documentación a cambio de una fuerte suma de dinero.
La fuente informó que bajo este irregular procedimiento se inscribieron cientos de personas originarias de Cuba, Emiratos Árabes, Palestina, Siria, Líbano, Camerún, México y Colombia, entre otras nacionalidades.
“El archivo central es otra cosa, ahí entraron a la base de datos e hicieron cambios en las inscripciones de nacimiento, habría que ver cuantos palestinos se documentaron bajo este procedimiento”, indicó. Similar situación se presentó en los registros civiles de Siguatepeque y Comayagua.
Confirmó que la mayoría de palestinos y sirios registrados como hondureños se les asignó el número 0301 y 0318, correspondiente a esos municipios. A otros se les asignó la nomenclatura 0809 que corresponde a extranjeros nacionalizados.
Pese a este cúmulo de irregularidades, la jefa de registro sigue laborando en el RNP y no se le ha aplicado ninguna medida disciplinaria ni administrativa, únicamente se le formuló un llamado de atención por parte de las autoridades.
De hecho, se conoció que a raíz de las últimas publicaciones dos ejecutivos del RNP ofrecieron a la funcionaria tramitarle sus prestaciones bajo la condición que interponga su renuncia y se retire discretamente.
Sin embargo, Obando es una pieza clave dentro de la investigación porque permitirá llegar a los altos funcionarios que le impartían órdenes para alterar la información de miles de compatriotas.
Piñata de inscripciones
LA PRENSA reveló ayer que las anteriores y actuales autoridades del RNP emitieron decenas de resoluciones mediante las cuales se autorizaba la inscripción de palestinos, muchos de los cuales no cumplían los requisitos para ostentar la nacionalidad hondureña.
Las autorizaciones emitidas bajo la figura de incorporación de hondureños nacidos en el extranjero (IHE) fueron firmadas por el exdirector Jorge Arturo Reina, el actual director Miguel Villeda Villela y el secretario general Fernando Anduray.
“La documentación era aparentemente legal, pero los datos (de los palestinos a inscribir) fueron falsificados en los registros civiles o en otro lado”, indicó la fuente informativa.
La intervención e investigaciones que los cuerpos de seguridad del Estado y el Ministerio Público realizan dentro del Registro Nacional de las Personas (RNP) para desbaratar la mafia que se encargó de documentar ilegalmente a centenares de ciudadanos de origen palestino y sirio comenzaron a arrojar los primeros resultados.
Para el caso, las indagaciones preliminares permitieron establecer que solamente con la clave de acceso de la jefa de archivo del Almacén Central, Leyla Lucila Obando, se efectuaron por lo menos 6,000 modificaciones a la base de datos de igual número de hondureños, cuyos datos de ciudadanía fueron asignados a extranjeros y otras personas de dudosos antecedentes.
Las fuentes informaron a LA PRENSA que producto de la intervención que se hizo a las oficinas del RNP en Tegucigalpa el pasado 24 de mayo, se ha encontrado abundante y valiosa información que servirá de base para llevar ante la justicia a los implicados en este vergonzoso acto ilegal de venta de la nacionalidad hondureña.
 ARCHIVOS. El RNP fue intervenido el 24 de mayo pasado y sus archivos se encuentran asegurados por Fusina.
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| Punrtos claves
1. Desde los registros civiles de Siguatepeque y Comayagua
Se adulteraban datos y se emitían partidas de nacimiento e identidades a palestinos y sirios.
2. Con esos documentos, los extranjeros llegaban
A los consulados de Honduras en España y solicitaban que se les extendiera el pasaporte del Estado de Honduras para poder conseguir visa Estados Unidos y la Unión Europea.
3. La Secretaría de Relaciones Exteriores
Confirmó que con documentación supuestamente legal emitida por el RNP se inscribieron 21 ciudadanos árabes en el consulado de Madrid, España.
3. Las autoridades del RNP
También emitieron entre 2013 y 2015 decenas de resoluciones de inscripción de palestinos que no reunían los requisitos mínimos para tener la identidad hondureña.
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La fuente informó que bajo este irregular procedimiento se inscribieron cientos de personas originarias de Cuba, Emiratos Árabes, Palestina, Siria, Líbano, Camerún, México y Colombia, entre otras nacionalidades.
“El archivo central es otra cosa, ahí entraron a la base de datos e hicieron cambios en las inscripciones de nacimiento, habría que ver cuantos palestinos se documentaron bajo este procedimiento”, indicó. Similar situación se presentó en los registros civiles de Siguatepeque y Comayagua.
Confirmó que la mayoría de palestinos y sirios registrados como hondureños se les asignó el número 0301 y 0318, correspondiente a esos municipios. A otros se les asignó la nomenclatura 0809 que corresponde a extranjeros nacionalizados.
Pese a este cúmulo de irregularidades, la jefa de registro sigue laborando en el RNP y no se le ha aplicado ninguna medida disciplinaria ni administrativa, únicamente se le formuló un llamado de atención por parte de las autoridades.
De hecho, se conoció que a raíz de las últimas publicaciones dos ejecutivos del RNP ofrecieron a la funcionaria tramitarle sus prestaciones bajo la condición que interponga su renuncia y se retire discretamente.
Sin embargo, Obando es una pieza clave dentro de la investigación porque permitirá llegar a los altos funcionarios que le impartían órdenes para alterar la información de miles de compatriotas.
Piñata de inscripciones
LA PRENSA reveló ayer que las anteriores y actuales autoridades del RNP emitieron decenas de resoluciones mediante las cuales se autorizaba la inscripción de palestinos, muchos de los cuales no cumplían los requisitos para ostentar la nacionalidad hondureña.
Las autorizaciones emitidas bajo la figura de incorporación de hondureños nacidos en el extranjero (IHE) fueron firmadas por el exdirector Jorge Arturo Reina, el actual director Miguel Villeda Villela y el secretario general Fernando Anduray.
“La documentación era aparentemente legal, pero los datos (de los palestinos a inscribir) fueron falsificados en los registros civiles o en otro lado”, indicó la fuente informativa.
