Tegucigalpa, Honduras.
Palestinos, sirios y ciudadanos de otras nacionalidades fueron inscritos fraudulentamente como hondureños mediante la penetración y adulteración de la base de datos de los registros de ciudadanía, confirmaron ayer autoridades del Registro Nacional de las Personas (RNP) de Honduras.
El directorio del RNP se reunió ayer lunes, y uno de los temas abordados fue la investigación periodística de Diario LA PRENSA que sacó a luz la venta de identidades a ciudadanos de origen árabe, especialmente palestinos y sirios.
José Miguel Villeda Villela, director del RNP, dijo que la publicación de LA PRENSA está en lo cierto y explicó que el hecho se presentó a finales de 2014, sin embargo, se tomaron medidas inmediatas para evitar que siguiera repitiéndose e incluso de despidió a varias personas involucradas, aunque no precisó el número.
“Efectivamente, como lo señala el reportaje de Diario LA PRENSA, en diciembre de 2014 recibí la consulta del embajador de Honduras en otro país sobre la certificación con la cual se había presentado un supuesto ciudadano hondureño a obtener su pasaporte, pero en la base de datos del RNP no coincidía la información”, recordó.
Indicó que tras la denuncia se ordenó a la Inspectoría del RNP que procediera con las averiguaciones, resultando que en efecto se había hecho una alteración, de la información en línea en la base de datos.
Explicó que efectivamente se hizo una manipulación alterando los nombres y números de identificación de una ciudadana hondureña y se colocaron los nombres de otras personas.
Posteriormente se imprimió una certificación de nacimiento y con ese documento se pretendió obtener un pasaporte en el exterior, concretamente en el consulado de Honduras en Barcelona.
“ Se había superpuesto nombres de una persona que no era hondureña y a raíz de eso con las sanciones administrativas que nos da la ley, procedimos al despido de esta persona y la secretaría general remitió el expediente al Ministerio Público, ya que son ellos a los que les corresponde la acción penal pública”, apuntó.
Por otro lado, confió que se ha prestado colaboración a la Dirección Nacional de Investigación e Inteligencia (DNIE) y a la Policía Internacional (Interpol), así como a la embajada de Estados Unidos en Honduras.
Adicionalmente se adoptaron algunas medidas a lo interno, como la suspensión de todas las claves de acceso a todo el personal, incluyendo a los miembros del directorio, se asignaron nuevos códigos de acceso y se implementó un nuevo sistema informático en los registros municipales que están en línea para tener una alerta en tiempo real de cualquier modificación que se realice a la base de datos.
Villeda Villela no supo precisar el número exacto de árabes que fueron documentados, pero reconoció que se trató de un caso que involucró a muchas personas.
Palestinos, sirios y ciudadanos de otras nacionalidades fueron inscritos fraudulentamente como hondureños mediante la penetración y adulteración de la base de datos de los registros de ciudadanía, confirmaron ayer autoridades del Registro Nacional de las Personas (RNP) de Honduras.
El directorio del RNP se reunió ayer lunes, y uno de los temas abordados fue la investigación periodística de Diario LA PRENSA que sacó a luz la venta de identidades a ciudadanos de origen árabe, especialmente palestinos y sirios.
José Miguel Villeda Villela, director del RNP, dijo que la publicación de LA PRENSA está en lo cierto y explicó que el hecho se presentó a finales de 2014, sin embargo, se tomaron medidas inmediatas para evitar que siguiera repitiéndose e incluso de despidió a varias personas involucradas, aunque no precisó el número.
“Efectivamente, como lo señala el reportaje de Diario LA PRENSA, en diciembre de 2014 recibí la consulta del embajador de Honduras en otro país sobre la certificación con la cual se había presentado un supuesto ciudadano hondureño a obtener su pasaporte, pero en la base de datos del RNP no coincidía la información”, recordó.
Indicó que tras la denuncia se ordenó a la Inspectoría del RNP que procediera con las averiguaciones, resultando que en efecto se había hecho una alteración, de la información en línea en la base de datos.
Explicó que efectivamente se hizo una manipulación alterando los nombres y números de identificación de una ciudadana hondureña y se colocaron los nombres de otras personas.
Posteriormente se imprimió una certificación de nacimiento y con ese documento se pretendió obtener un pasaporte en el exterior, concretamente en el consulado de Honduras en Barcelona.
“ Se había superpuesto nombres de una persona que no era hondureña y a raíz de eso con las sanciones administrativas que nos da la ley, procedimos al despido de esta persona y la secretaría general remitió el expediente al Ministerio Público, ya que son ellos a los que les corresponde la acción penal pública”, apuntó.
Por otro lado, confió que se ha prestado colaboración a la Dirección Nacional de Investigación e Inteligencia (DNIE) y a la Policía Internacional (Interpol), así como a la embajada de Estados Unidos en Honduras.
Adicionalmente se adoptaron algunas medidas a lo interno, como la suspensión de todas las claves de acceso a todo el personal, incluyendo a los miembros del directorio, se asignaron nuevos códigos de acceso y se implementó un nuevo sistema informático en los registros municipales que están en línea para tener una alerta en tiempo real de cualquier modificación que se realice a la base de datos.
Villeda Villela no supo precisar el número exacto de árabes que fueron documentados, pero reconoció que se trató de un caso que involucró a muchas personas.
