El obispo auxiliar de la diócesis de San Pedro Sula, monseñor Rómulo Emiliani, reconoció el martes que la construcción del nuevo centro penal de San Pedro Sula se encuentra paralizada desde hace cuatro meses por falta de fondos.
A pesar de los reiterados anuncios de que las obras se reanudarían, la falta de dinero se ha convertido en un reto por superar.
'Se están buscando nuevos fondos para la financiación de esta cárcel y que los planes originales tuvieron algunas modificaciones para cumplir con los requisitos internacionales de seguridad, aunque sin haber recibido autorización al respecto'.
El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, visitó el proyecto en 2015 y señaló su deseo de la obra continuara.
“Una de las cosas fundamentales es terminar esta penitenciaria porque necesitamos colocar a los reclusos de San Pedro Sula y de toda la región en celdas seguras, donde se termine el reino de los presos que han tenido una especie de autogobierno por muchos años”, dijo el mandatario.
“Gestionaremos recursos para reanudar los trabajos y terminar. La cárcel de Naco (Cortés) debe terminarse. Allí trasladaremos los reclusos del penal de San Pedro Sula. Así pondremos orden en las cárceles”, manifestaba el presidente en aquella oportunidad.
El nuevo presidio facilitará el traslado de reclusos con fuertes medidas de seguridad y descongestionará el sistema carcelario con los niveles adecuados de seguridad y rehabilitación.