San Pedro Sula, Honduras.
Organizaciones ambientalistas exhortan al Gobierno a examinar las plantaciones de palma aceitera que se encuentran en la zona núcleo del Parque Nacional Jeannette Kawas.
Una vez que posea la información sobre las áreas afectadas e identifique a las personas que cultivan puede ejecutar una estrategia que permita el menor daño ambiental, por un lado, y efectos negativos, por otro, en el ámbito socioeconómico.
Eliminar de raíz las plantaciones, según algunos ambientalistas, podría ser una medida radical que perjudicaría a personas que no tienen un terreno donde cultivar para sobrevivir. Desde el punto de vista de Omar Palacios, representante de la organización holandesa Solidaridad, el Instituto de Conservación Forestal (ICF) debe “examinar los títulos de usufructo que poseen las personas que se encuentran en la zona de amortiguamiento para buscar soluciones”. “En años anteriores les entregaron 158 títulos de usufructo a pequeños productores que están en la zona de amortiguamiento y el ICF debe examinar”, dijo Palacios.
A estos productores tendrían que exigirles buenas prácticas para que no perjudiquen el parque.
Palacios advierte que “la palma cultivada en áreas protegidas no tiene futuro porque antes de que finalice 2017 todas las plantas extractoras tendrán el certificado de la Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible”.
Solidaridad Network es una fundación de Holanda que, junto con otras organizaciones, desarrolla el Proyecto de Aceite Sostenible en Honduras (Pash). Con la Fundación Hondureña de Investigación Agrícola (Fhia) están convenciendo a productores de palma que se encuentran en áreas prohibidas para que cultiven cacao o rambután.
Ferdinand Florentino, presidente de Fundación para la Protección de Lancetilla, Punta Sal y Texiguat (Prolansate), es del criterio de que “la situación actual del parque es a causa del descuido de autoridades de varios gobiernos”.
“El Gobierno actual debe tomar las medidas para que esto no continúe”, manifestó Florentino.
Hay plantaciones nuevas en áreas donde hubo manglares.
El domingo, LA PRENSA publicó un reportaje en el cual demuestra que existen nuevas plantaciones de palma dentro del área núcleo del parque.
Organizaciones ambientalistas exhortan al Gobierno a examinar las plantaciones de palma aceitera que se encuentran en la zona núcleo del Parque Nacional Jeannette Kawas.
Una vez que posea la información sobre las áreas afectadas e identifique a las personas que cultivan puede ejecutar una estrategia que permita el menor daño ambiental, por un lado, y efectos negativos, por otro, en el ámbito socioeconómico.
Eliminar de raíz las plantaciones, según algunos ambientalistas, podría ser una medida radical que perjudicaría a personas que no tienen un terreno donde cultivar para sobrevivir. Desde el punto de vista de Omar Palacios, representante de la organización holandesa Solidaridad, el Instituto de Conservación Forestal (ICF) debe “examinar los títulos de usufructo que poseen las personas que se encuentran en la zona de amortiguamiento para buscar soluciones”. “En años anteriores les entregaron 158 títulos de usufructo a pequeños productores que están en la zona de amortiguamiento y el ICF debe examinar”, dijo Palacios.
A estos productores tendrían que exigirles buenas prácticas para que no perjudiquen el parque.
Palacios advierte que “la palma cultivada en áreas protegidas no tiene futuro porque antes de que finalice 2017 todas las plantas extractoras tendrán el certificado de la Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible”.
Solidaridad Network es una fundación de Holanda que, junto con otras organizaciones, desarrolla el Proyecto de Aceite Sostenible en Honduras (Pash). Con la Fundación Hondureña de Investigación Agrícola (Fhia) están convenciendo a productores de palma que se encuentran en áreas prohibidas para que cultiven cacao o rambután.
Ferdinand Florentino, presidente de Fundación para la Protección de Lancetilla, Punta Sal y Texiguat (Prolansate), es del criterio de que “la situación actual del parque es a causa del descuido de autoridades de varios gobiernos”.
“El Gobierno actual debe tomar las medidas para que esto no continúe”, manifestó Florentino.
Hay plantaciones nuevas en áreas donde hubo manglares.
El domingo, LA PRENSA publicó un reportaje en el cual demuestra que existen nuevas plantaciones de palma dentro del área núcleo del parque.
