En su tercer comunicado, la Comisión Especial para el Proceso de Depuración y Transformación de la Policía Nacional solicitó al secretario de Seguridad, Julián Pacheco, que suspenda de “manera inmediata a los miembros activos de la institución presuntamente involucrados en los hechos señalados en tales informes”.
Debido a la publicación del diario estadounidense The New York Times, en la que se citan 54 nombres de policías de varios rangos involucrados en los crímenes de los extitulares de la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN), Julián Arístides Gonzáles y Alfredo Landaverde, la comisión informó que los documentos les fueron entregados por el actual director de la Policía, Félix Villanueva.
“Los nombres que se han mencionado en dichas publicaciones y en base a la información preliminar que nos entregó el director de la Policía, 25 oficiales están activos, cuatro están en situación de retiro y dos han fallecido. Todos los demás nombres que se mencionan están siendo investigados para confirmar su situación y ubicación actual”, dice el comunicado.
Acelerar investigaciones
La comisión hizo un llamado a todos los operadores de justicia exhortándolos a que procedan a realizar las investigaciones respectivas en el caso de los mencionados por el diario internacional.
“Deben investigarse los hechos que se les imputan para que establezcan la veracidad de los mismos y que se tomen las acciones que correspondan. Informamos que ya hemos recibido los informes solicitados sobre los nueve generales activos de la solicitados de la Policía por parte del Tribunal Superior de Cuentas (TSC), la Procuraduría General de la República (PGR), el Poder Judicial y la Dirección de Investigación e Inteligencia”, agregaron.
Hoy 19 de abril, la comisión está a la espera de los informes del Ministerio Público y del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) para continuar con el proceso de evaluación, idoneidad y nivel de confianza, según lo expuesto en el tercer comunicado.
El grupo compuesto por Vilma Morales, Omar Rivera, el pastor Alberto Solorzano y asesorados por German Leitzelar y Jorge Machado, trabajan junto con el secretario de Seguridad, Julián Pacheco, en la depuración policial que mediante decreto de emergencia estableció el presidente Juan Orlando Hernández y el Congreso Nacional.
La emergencia surgió luego que medios nacionales revelaran la participación de altos oficiales de la Policía en crímenes de hondureños destacados por su lucha contra el narcotráfico. Seguidamente, una publicación del The New York Times en su versión en español reveló que los exdirectores de la Policía Ricardo Ramírez del Cid, José Luis Muñoz Licona, Salomón Escoto Salinas y el exdirector de la DNIC José Francisco Murillo planificaron la muerte de los antes señalados.
“Reiteramos nuestro compromiso de seguir con el proceso de depuración y reestructuración para dar paso al desarrollo de una nueva Policía Nacional”, concluyó la comisión depuradora.